El Presidente de EE.UU., Barack Obama, advirtió que está cada vez más cerca una respuesta definitiva de su país al posible uso de armas químicas por parte del Gobierno sirio, aunque subrayó que no habría que precipitarse a exigir una intervención militar, en una entrevista difundida ayer por CNN.
Obama recalcó que la situación está "tocando lentamente los intereses centrales" de EE.UU. Sin embargo, pidió no precipitarse a exigir una intervención militar. Existen cuestionamientos legales y también hay que tener en cuenta el apoyo internacional, aseguró.
Rusia y EE.UU. reclamaron de forma conjunta una "investigación imparcial" sobre una supuesta masacre ocurrida el miércoles cerca de Damasco por el uso de gas venenoso y denunciada por parte de la oposición, informó el Ministerio de Exteriores ruso.
El comunicado del Ministerio fue emitido tras una conversación telefónica mantenida entre el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, y el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry.
Obama dijo que EE.UU. sigue recopilando información. Pero "esto es claramente un suceso que provoca una gran preocupación", manifestó el Mandatario sobre el supuesto empleo de armas químicas en el ataque de la madrugada del miércoles cerca de Damasco.
"No hay duda de que cuando se usan armas químicas a gran escala es muy problemático y eso comienza a afectar a alguno de los intereses centrales de EE.UU., como garantizar la no proliferación de armas de destrucción masiva, así como la protección de nuestros aliados y nuestras bases en la región", sostuvo Obama.
Aseguró que Washington está presionando a la ONU para "promover una mejor acción" sobre Siria y llamó al Gobierno del Presidente Bashar al Assad a permitir la inspección sobre el supuesto uso de armas químicas.
"Ya estamos en comunicación con toda la comunidad internacional (..) no esperamos cooperación (por parte de Damasco), en vista de los antecedentes", añadió.
Rusia instó además a la oposición siria a permitir el acceso seguro de los expertos de la ONU en armamento químico a la zona donde supuestamente se produjo el ataque.
"La pelota está ahora en las manos de la oposición siria, que debe garantizar el acceso seguro de la misión", afirmó el Ministerio de Exteriores ruso.
Reino Unido responsabilizó al régimen sirio del ataque con gas que causó la muerte de cientos de personas el miércoles, si bien no hay indicios concretos sobre los hechos.
El Gobierno sirio ha negado el ingreso a los inspectores de la ONU. La negativa alimenta la sospecha de que hay algo que esconder allí, dijo el secretario de Relaciones Exteriores británico, William Hague. La única "explicación convincente" de tantas muertes es el uso de gas venenoso, aseguró Hague. "Creemos que se trata de un ataque químico a gran escala del régimen de Al Assad", añadió.
El próximo miércoles, diplomáticos estadounidenses y rusos se reunirán en La Haya para hablar de las posibilidades de la celebración de una conferencia internacional para abordar la situación en Siria.
ONU: seis millones de niños afectados
La guerra civil en Siria ha llevado a más de seis millones de niños a una situación de sufrimiento extremo, con 3,1 millones de ellos afectados por el conflicto, dos millones desplazados internos y un millón refugiados en un país vecino, informó la ONU. El organismo anunció ayer la "vergonzosa marca" alcanzada de un millón de niños que han abandonado Siria con sus familias, aunque muchos lo han hecho solos.