"Al principio fue catastrófico para mis padres que yo quisiera estudiar música..."
Marcelo Javier Velásquez Álvarez es profesor de educación musical y, además, es el músico líder de la banda Interludio de La Unión, conjunto que alcanzó renombre hace algunos días cuando se dio a conocer que compuso la música para la obra de circo "La Laguna del Inca", de la escuela de circo Los Placeres de Valparaíso, que se presentó con éxito en la capital de la provincia del Ranco.
Velásquez, quién ayer cumplió 39 años, llegó a La Unión en el año 2000 para trabajar en el Liceo Industrial Ingeniero Ricardo Fenner Ruedi. Al año siguiente, cuando se radicó en la ciudad, obtuvo empleo en el Liceo Bicentenario Rector Abdón Andrade Coloma, establecimiento donde ejerce hasta el día de hoy.
El músico realizó sus estudios de enseñanza básica en la Escuela México de Osorno, mientras que la enseñanza media la cursó en el Instituto Comercial de la misma ciudad. Sus estudios superiores los efectuó en la Universidad Austral de Chile, donde estudió la carrera de Pedagogía en Educación Musical, que se impartía en el Conservatorio de Música.
-¿Cómo surgió su interés por la música?
Mi familia tuvo un poco de influencia porque mi papá fue músico; sin embargo, llegué a la música de casualidad debido principalmente a que un día vi a un amigo tocando guitarra y le pedí que me enseñara, eso pasó en segundo medio. Desde ahí comencé a tocar guitarra y comencé a darme cuenta de que eso que me gustaba.
Recién en cuarto medio, porque en un principio tenía pensado estudiar otra carrera como técnico forestal porque ese era el campo que me llamaba la atención. Además me gustaba tocar música porque era divertido pero no había pensado en estudiar la carrera, por eso me decidí rápidamente y fue la mejor elección.
-¿Cómo recibió su familia ese repentino vuelco?
Para ellos al principio fue catastrófico que yo estudiara música porque los músicos no tienen muy buena fama. Lo que yo trataba de hacer entender a mis papás es que yo iba a estudiar pedagogía en música e iba enseñar música, no iba a ser un músico como tal. Con el tiempo entendieron y lo aceptaron.
-¿Cómo fue su experiencia universitaria?
En la universidad me enseñaron un año de flauta dulce, dos años y medio de guitarra clásica y tres años de piano, eso fue lo que vimos de instrumentos. Como es una carrera enfocada a trabajar con alumnos y enseñar en clase, no es una carrera de interpretación musical por lo que todos los instrumentos se aprenden a utilizar de manera funcional.
-¿Cuándo se inició su experiencia laboral?
Partió en Osorno, primero trabajé en el Colegio Simón Bolivar y después en el Colegio Creación. Después pasé al Liceo Industrial de La Unión y donde trabajo hoy, el Abdón Andrade Coloma.
-¿Cuándo comienza a conformar grupos de música?
Pasé por varios grupos antes de formar Interludio, entre ellos el conjunto Fusión Andina que aún existe en Osorno. Cuando llegué a La Unión me desconecté de todos los grupos en donde había estado y por lo tanto la inquietud de seguir tocando nació de forma natural, así nació Contratiempo, que lo conformé con alumnos y que se disolvió cuando ellos ingresaron a la universidad.
¿Cómo nació Interludio?
Nace en 2007. Cuando se disolvió Contratiempo quedamos tres integrantes y comenzamos a buscar a otros que se unan para formar un nuevo conjunto, fue difícil encontrar a músicos que toquen instrumentos andinos pero logramos dar con ellos. Desde que se creó el grupo han desfilado varios integrantes por el elenco, pero desde hace dos años tenemos un número estable de seis integrantes que son Gabriela Millapán, Raúl Bustos, Cristian Gutiérrez, César Millapán, Miguel Vásquez y yo, Marcelo Velásquez.