Un multitudinario y emotivo adiós brindó ayer la comunidad de Reumén a José Luis "Kelo" Miranda Oyarzo (30), muerto trágicamente el 4 de septiembre, en el accidente del bus Tur Bus en que viajaba como auxiliar, en Angostura.
Delegaciones de Cerro Navia, barristas de Colo Colo, bomberos y carabineros (uno de sus hermanos pertenece a la institución) repletaron la iglesia Nuestra Señora de Lourdes de Reumén, donde el sacerdote pidió orar por el eterno descanso de su alma, por la resignación de sus padres y hermanos. Incluso también por otras víctimas de accidentes de tránsito registrados este año en la zona. Y por la paz en Siria.
ALEGRE Y OPTIMISTA
Todos siguieron el oficio con profundo recogimiento, señalando en el momento de la despedida uno de sus amigos que "nunca hubiésemos deseado que llegara este día". Porque el "Kelo", era un joven alegre, optimista, y con una sonrisa fácil en su rostro que cautivaba a todos. Y desde pequeño, como lo reveló el set de fotografías suyas, tomadas desde la infancia, que pasaron por un telón a la hora del responso final.
Fue un momento que arrancó aplausos dentro de la iglesia, pero también las lágrimas de grandes y niños, en especial de sus padres y hermanos, que no se resignan a su inesperada y trágica partida.
NO ES EL FINAL
Por eso el sacerdote habló en el Evangelio de la resurrección, de Lázaro y sus hermanas y de Jesús, su amigo. "La muerte -dijo- no es el final de la vida" y pidió a la familia de José Luis hallar en el Evangelio la resignación y la paz en sus corazones.
Una hora duró el oficio religioso que comenzó pasadas las 15 horas, tras arribar a la iglesia el féretro, transportado a pulso y a pie, desde su casa hasta la misma iglesia, por una escolta de amigos y envuelto en la bandera del Club Colo Colo, uno de los amores de vida, así como Reumén.
ROMERíA
ROMERíA
Al término de la misa el cortejo salió en lenta caravana hacia el cementerio reumenino, distante a unos tres kilómetros y medio desde el pueblo.
Fue una romería con más de mil personas que quiso acompañar a la familia del joven auxiliar de Tur Bus que, por lo que todos coincidían en señalar, "dejó su sonrisa como mejor recuerdo".