Basura en los ríos
El fondo del Calle Calle y el Valdivia está lleno de sorpresas, pero la suciedad también está sobre las aguas.
Muchos puntos de análisis resiste la situación descrita por un experimentado conocedor de los fondos de los ríos que atraviesan Valdivia, pero sin duda lo más interesante que dejan sus declaraciones tiene que ver con la actitud de mucha gente que ni se sonroja al convertir los torrentes en verdaderos basurales subacuáticos.
Dice Carlos Cisternas que no entiende a las personas que rasgan vestiduras para criticar a empresas e instituciones que contaminan mediante el vertimiento de desechos, pero que luego no dudan ni un instante al arrojar sus propios desechos, consistentes en todo tipo de materiales, artefactos, envoltorios y, en fin, lo que la imaginación pueda resistir porque son excesivas las muestras de desprecio por el estado de los componente geográficos que mejor identifican a la ciudad y a la región, que por algo se llama Los Ríos.
No es poca la experiencia de este ciudadano, que exhibe desde un vehículo hasta electrodomésticos en el particular museo que ha ido formando con su trabajo. Sin ir más lejos, después de la última Noche Valdiviana el objeto de su singular pesca fue un refrigerador, además de otros objetos de la más variada índole y del más disímil origen.
Esto no puede entenderse de otra forma que no sea una reprobable conducta, la que ha convertido a los ríos valdivianos en una nueva versión de la alfombra bajo la cual supuestamente alguien oculta la basura de ojos inquisidores.
Encontrar un vehículo o un refrigerador es algo excepcional, indudablemente, pero tampoco es necesario tener la capacidad de bucear en las profundidades de los ríos para observar la gran cantidad de basura que es arrojada a diario desde las riberas y que flota delante de quien quiera verlo.
Esto habla muy mal de todos, porque no se puede echar toda la culpa a desaseados y despreocupados visitantes habituales durante cada verano.
Aquí hace falta un cambio de actitud, que debe nacer de los propios valdivianos para rescatar la limpieza de nuestros inigualables ríos.