Cores destacan aprobación de la nueva Política de Desarrollo Silvoagropecuario
Una positiva evaluación de la nueva Política Regional de Desarrollo Silvoagropecuario, aprobada por unanimidad en la última sesión plenaria del Consejo Regional de Los Ríos, previa al cambio de mando, realizaron ayer los cores Ítalo Martínez (PS) y Elías Sabat (RN).
Ambas autoridades participaron de la votación y seguirán además en sus puestos por los próximos cuatro años, razón por la destacaron que la puesta en marcha de este instrumento contribuirá al mejoramiento de la competitividad de todo el sector, en todos los ámbitos que éste considera, al mismo tiempo que su aprobación se logró después de meses de intenso trabajo al interior de la Comisión de Fomento Productivo del cuerpo colegiado.
Dentro de las iniciativas esta política se contemplan programas de formación, capacitación y especialización, fortalecimiento de capacidades para la asociatividad, mejoramiento de infraestructura, innovación en el desarrollo de productos, y promoción del consumo de productos locales para mejorar la comercialización.
Al respecto, el consejero Martínez destacó que "esta es una importante noticia para la región de Los Ríos, especialmente en el sector silvoagropecuario, ya que se trata de un documento que permitirá diseñar, programar y planificar el desarrollo agrario de nuestra región y que sin duda alguna esperamos que sirva para que le demos un impulso a este sector importante de la economía".
"Esperamos que se cumpla lo que allí hemos trazado, porque se trata de un documento de navegación que va a permitir apalancar y destinar fondos del FNDR y del nivel central para el desarrollo de este rubro", apuntó la autoridad.
Cabe recordar que como parte de este instrumento se contempla también mejorar la asesoría, fortaleciendo equipos territoriales mediante el trabajo conjunto con organismos públicos, lo cual permitirá facilitar el desarrollo de la industria alimentaria de las micro, pequeñas y medianas empresas.
Igualmente y en términos medioambientales, se consideran programas que apuntan a reducir los impactos que genera la producción de alimentos, así como la incorporación de energías limpias, sumando el componente cultural que integra a las comunidades indígenas a lo largo de toda la región, reconociendo la diversidad cultural y étnica y las formas de vida propias del mundo rural.
En esa línea, Sabat relevó que durante la misma sesión plenaria, y antes de la aprobación de la política como tal, se incorporara la resolución de incorporación del componente indígena, ante lo cual dijo sentirse "conforme de que se haya incorporado la participación de los pueblos originarios. Por elementos como este es que esperamos que la política comience a dar sus frutos en cuanto al desarrollo silvoagropecuario, para que incluyamos a todos los sectores que tienen vinculación con éste".