Mirar Valdivia con ojos de niño
La Semana de la Infancia invita a una serie de actividades relacionadas con los derechos y experiencias de los más pequeños.
Hasta el miércoles se extenderá en Valdivia la Semana de la Infancia, que incluye una serie de actividades destinadas a reflexionar sobre los derechos de los niños y niñas. Hay charlas, mesas de trabajo, jornadas de recreación, cine y un encuentro masivo en el Coliseo. Pero, además, un espacio para analizar la situación de vida infantil en la capital regional, sus necesidades y las inquietudes que tienen los más pequeños.
Para acercarse a esa realidad, los organizadores de la Semana (Red Comunal de Infancia de la municipalidad) convocaron a un concurso de cuentos, pintura y fotografía, en el cual invitaron a participar a estudiantes de los diferentes colegios locales. El tema era la ciudad y su vida en ella. Llegaron números trabajos y sorprendió a los jurados la gran diversidad de áreas que ellos abarcaban, desde lo escolar hasta lo familiar; desde el barrio a lugares míticos.
Ver y leer esas creaciones permitió abrir una ventana hacia un mundo que muchas veces pasa inadvertido para los adultos, pero que refleja vivencias cotidianas en la casa y en el barrio, desde las cuales se puede apoyar mejor a los niños y jóvenes.
Por ejemplo, llamó la atención en los cuentos la marcada presencia de los abuelos como personas a cargo del cuidado de las familias y el dolor que causa a los niños la lejanía o los problemas entre los padres u otros parientes. También el miedo de algunos a lo que sucede en las calles de sus barrios; el encierro que les obliga a guardar; las medidas de seguridad que deben tomar. Otro punto recurrente fue el bullying escolar y el daño que causa; además se ve muy marcada la importancia de los amigos y de los espacios para jugar. La ciudad y su historia aparecen también como protagonistas.
Los cuentos ganadores (La ciudad encantada, La bruja del Torreón y El peor Año Nuevo) fueron publicadas por Diario Austral, pero las fotografías y dibujos seleccionados también se pueden ver en una exposición en el edificio consistorial. Darse el tiempo para observarlos resulta un buen ejercicio, para entender un poco más a los niños y niñas valdivianos, en su condición de habitantes de este lugar compartido.