Consultas por bandera y ciclovías
El polémico proyecto de la Bandera Bicentenario en Valdivia sigue en la agenda local, porque no se ha logrado acuerdo respecto de la ubicación de este gran pabellón patrio, cuya instalación es parte de un plan nacional financiado por la Presidencia, para marcar un hito en todas las capitales regionales del país, que recuerde los 200 años de vida independiente.
La iniciativa demanda una inversión de 500 millones de pesos aproximadamente, llegados desde el gobierno central, y el Concejo Municipal ya aprobó su emplazamiento en la Plaza Pedro de Valdivia, pero hubo dificultades y ahora se estudia realizar una consulta ciudadana para elegir un lugar distinto y definitivo.
Se busca hacer una votación al respecto, pero a la luz de todos los antecedentes, una acción así parece tardía. Sobre todo si el Concejo ya asumió una primera responsabilidad y no hay forma de revertir el proceso, que meses atrás fue ampliamente cuestionado por el gasto excesivo que implica.
Por supuesto que la participación ciudadana es positiva y básica para que las decisiones de la autoridad resulten acertadas, pero debe ser vinculante y oportuna, para que las personan confíen en que su opinión realmente será considerada.
Por ejemplo, un área donde ella sí se echa de menos es en el tema de las ciclovías. Antes no se preguntó y los resultados son malos, especialmente el Avenida Pedro Aguirre Cerda, donde la promesa de vías especiales terminó siendo un espacio estrecho, pintado sobre la vereda y compartido con los peatones. Claramente, las decisiones ahí las tomaron personas que no transitan en bicicleta y que no escucharon otras voces.
En Circunvalación se notaban avances y un diseño que contemplaba ciclorutas mejor pensadas, pero aún no se aprecian con claridad y existe el riesgo de que sean incorporadas en último momento y de manera muy diferente a la ideada originalmente. Por lo mismo y previo a que se concreten los anuncios presidenciales, se hace fundamental que se consulte a los ciclistas sobre cómo construir estas áreas.
Para la bandera no hubo tiempo y ya se aceptó como venía; con las ciclovías, sí hay opción de mejorar.