Caerse, levantarse y aprender
Elena
Velasco
"Si aprendimos a andar en bicicleta, aunque pasen años sin hacerlo no nos olvidamos. ¿Por qué?", preguntó el jueves Kenneth Gent a 200 estudiantes de liceos técnicos profesionales de nuestra región, reunidos en el Hotel Villa del Río. La respuesta fue unánime: "No olvido, pues al aprender me caí muchas veces".
Durante la jornada, los estudiantes de 15 a 17 años se impregnaron de mensajes clave: que los emrpendimientos de la vida requieren pasión, compromiso, disciplina, esfuerzo, caerse y levantarse. Que con eso, el aprendizaje es duradero. El encuentro "La actitud emprendedora. Hacia una cultura de innovación" fue organizado por la Universidad Santo Tomás, a través del proyecto "Emprendimiento en Media" financiado por el Fondo de Innovación para la Competitividad del Gobierno Regional de Los Ríos.
Se llamó a los estudiantes a que, cuando emprendan, no busquen el éxito inmediatista, para no frustrarse temprana e injustificadamente; sino que valoren cada paso y perseveren. Sobre la actitud para innovar, Juan Pablo Contreras, del CNIC, demostró mediante provocaciones neurológicas que nuestra percepción depende del contexto; y que, por lo tanto, la actitud abierta al contacto con lo diferente (otros países, otras personas) nos ayuda a modificar paradigmas e innovar.
El empresario valdiviano Carlos Rubio, que cuenta con un Avonni y una alianza con 3M, compartió que previo al éxito abunda la dificultad; pero destacó la satisfacción del que lucha por sus metas. "Uno tiene que vivir los sueños de uno", realzó y cerró con una reflexión sobre las relaciones interpersonales apuntando a la familia como "el emprendimiento principal de la vida".
Expusieron también dos finalistas de 15 años del concurso AprendoEmprendo, que con su proyecto han atraído a grandes empresas. Tras ellos, los invitados reflexionaban: "Para emprender, hay que tener una buena idea y esforzarse al máximo".