En el Hospital Regional, fuera de riesgo vital, se recupera el menor de siete años, iniciales R.G., quien el pasado sábado fue salvado milagrosamente por su amigo y compañero de curso José Loaiza, de 9 años, de morir ahogado en el lago Ranco.
Todo ocurrió durante un paseo de curso del colegio particular "El Bosque" de Calcurrupe, cuando el grupo compuesto por once niños, llegó al balneario de Coique en un tradicional paseo de curso de fin de año, alrededor de las 9 de la mañana.
Tras desayunar, algunos de los niños, entre ellos R. G. se fueron al agua a bañar. José Loayza, siguió atentamente a los bañistas con su mirada.
CORRIó al agua
El mismo niño señaló posteriormente, que vio cuando uno de ellos, se fue a lo profundo del lago y que al intentar salir, no pudo.
"Me asusté y le grité desde la orilla que intentara salir. Lo hizo, pero estaba mal y cayó boca abajo en el agua. Entonces y sin pensarlo dos veces corrí hasta él, puse mi cabeza por debajo del agua, en uno de sus brazos, y como pude lo saqué. Lo tiré en la arena y quedé observándolo. No había ningún adulto en ese momento, pero varios apoderados llegaron corriendo después. Todos estaban asustados, mientras mi hermano Emerson, llamó por teléfono a una ambulancia".
LO SALVASTE
El pequeño José Loayza se siente feliz con lo que hizo, en especial, con lo que le dijo la madre del niño al que salvó. "¡Salvaste a mi bebé, lo salvaste. Eres un niño valiente".
Y José lo asienta, porque cree que no haber intervenido, su amigo y compañero hubiese muerto. (nota gentilezawww.diariosur.cl)