Editorial
Empresa de los Ferrocarriles del Estado creará su propia Corporación para desarrollar proyecto para patrimonio local. Sería muy triste que después de tanto esfuerzo, la iniciativa se olvidara o se perdiera en manos de instituciones que actuaran con lógica centralizada.
Decisión de EFE sobre "Valdiviano"
Inquietud y sorpresa ha generado a nivel local, la decisión de la Empresa de los Ferrocarriles del Estado de poner término al contrato que tenía desde 2008 con la Asociación de Patrimonio Ferroviario de Valdivia, para la operación del Tren del Vapor El Valdiviano, un proyecto ampliamente valorado por la comunidad local y sobre el cual hay esperanzas de desarrollo turístico.
La determinación de Efe fue tomada en reunión de directorio y comunicada a la Asociación mediante una carta fechada el 20 de mayo recién pasado, sin mediar un aviso o una explicación. Además, en una nota periodística posterior, la empresa asegura que formará junto al gobierno regional su propia Corporación de derecho privado sin fines de lucro, en la cual podrán tomar parte universidades, municipios e incluso la misma Asociación. Esta nueva institucionalidad se haría cargo del proyecto del Museo del Vapor y del tren, con un plan de largo plazo.
El tema ya está zanjado y es lógico pensar que esta salida puede tener relación con la llamada "recuperación" de la locomotora "Virgen de la Esperanza", que estaba abandonada en Osorno. Sin embargo desde Efe descartan un vínculo entre esa polémica y la determinación tomada. Aseguran que la idea es solamente desarrollar mejor los planes de trenes turísticos.
Así vistos los hechos, causa sorpresa la forma abrupta de término de relación con una organización ciudadana que ha trabajado intensamente por mantener vigente la tradición ferroviaria de la zona. Además queda la inquietud respecto del futuro de los planes iniciados.
Es de esperar que efectivamente ellos se mantengan en el tiempo y sean mejorados, a través de la inclusión de múltiples actores sociales interesados en que el tren se consolide como un producto potente, capaz de apoyar, especialmente, a los artesanos y emprendedores de Pishuinco, Huellelhue y Antilhue, cuyas comunidades expresaron un compromiso con el proyecto, en el último cabildo efectuado en la estación de Valdivia.
Sería muy triste que después de tanto esfuerzo, la iniciativa se olvidara o se perdiera en manos de instituciones que actuaran con una lógica centralizada.