Juan Vargas Oñate
Uno de los tres acusados de haber dado muerte a golpes y puñaladas, al pescador Javier Sáez Sáez (18), podría arriesgar una pena de hasta 10 años y un día de cárcel. Se trata del ex funcionario de la municipalidad de San José de la Mariquina, Nicolás Núñez Jeria.
El fiscal que llevó adelante la investigación, Alejandro Ríos, señaló ayer al iniciarse el juicio oral por el crimen ocurrido el 1 de junio de 2014, que está pidiendo a los jueces penas de siete años de cárcel y otros tres para Núñez, por el delito de tenencia de armas de fuego, sin la debida autorización.
Los otros dos imputados, son José Medina Rehl y su hijo Eric Medina Gatica, quienes actuaron junto a Núñez, siendos los tres procesados como autores del crimen de Sáez.
Testigos de discoteca
Durante el juicio serán 78 los testigos que jurarán o prometerán ante el tribunal, que preside el juez Ricardo Aravena, decir la verdad acerca de lo que ocurrió esa madrugada, en la calle Trinchera, afuera de la discoteca Luna. En especial, las personas que trabajaban en ese local y uno de sus guardias, que fue el que relató a los carabineros lo que había acontecido con el joven pescador de Mehuín, que murió tras haber sido trasladado moribundo en un furgón de Carabineros, desde la misma discoteca, hasta el hospital Santa Elisa.
Esa madrugada, Javier Sáez fue violentamente atacado, golpeado y apuñalado por los tres detenidos, cayendo herido de muerte a causa de las graves heridas cortopunzantes y lesiones provocadas por elementos contundentes en su cuerpo.
Los inculpados fueron detenidos horas después por Carabineros de San José de la mariquina, en la casa de José Medina Rehl, en calle Santa Rosa Norte, hasta donde llegaron a buscar refugio, escapando de un grupo de personas, familiares y amigos del pescador que querían lincharlos.
La vivienda fue apedreada y Carabineros debió pedir refuerzos al retén de Máfil y también a la Subcomisaría de Fuerzas Especiales para intentar controlar la ira de los dolidos familiares y amigos de Sáez, que incluso causaron daños en el hospital al enterarse de su deceso.
Ese día, los tres imputados que estaban con lesiones y ensangrentados, por otras riñas en las que nada tuvo que ver Javier Sáez, debieron ser atendidos médicamente en Lanco, para proteger su integridad física de las amenazas que recaían sobre ellos.
Ayer, el juicio con sus primeros alegatos se desarrolló con normalidad.
El abogado querellante, Roberto Winter, quien representa a la familia de Javier Sáez en el luicio, está demandado a los jueces dictar una cadena perpetua contra los tres imputados, que están acusados por la Fiscalía de homicidio simple. Sin embargo, se sabe que el joven pescador no conocía a sus homicidas y nunca se vio involucrado esa madrugada en una riña. Ese día solo estaba en el exterior de la discoteca, fumando un cigarrillo, cuando fue mortalmente atacado y asesinado por un padre, su hijo y el ex funcionario municipal.
Querellante pide cadena perpetua
"Todo indica que la víctima estuvo ese día en el lugar y el momento equivocados, encontrando la muerte..."
Alejandro Ríos, Fiscal de San José.
