María José Alcalde

Jefa de carrera de Diseño Gráfico IP Santo Tomás

Cada vez que un profesional piensa en iniciar un negocio de forma independiente, para transformarse en un emprendedor, se enfrenta con una serie de dificultades que hacen que sea altamente riesgoso iniciar una actividad económica en el área de la micro y pequeña empresa.

Lo anterior, evidencia la necesidad de que los emprendedores, innovadores o creadores, cuenten con un lugar o un espacio colaborativo donde encontrar apoyo para no fallar en el intento y su negocio se mantenga en el tiempo.

Contar con apoyos en comercialización, estudio de mercado o transferencia tecnológica es fundamental para que las personas que deseen emprender tomen la decisión de hacerlo, porque no podemos exigirles ser creativos, saber de marketing, de branding, de postular a fondos públicos, de administración de empresas y además ser creativos, un emprendimiento para poder surgir necesita apoyo, hacerse cargo de todas las áreas que abarca un negocio, agota la paciencia, la energía y a veces las ganas de emprender. Para seguir creando, innovando e iterando con nuevos productos o ideas, el creador necesita poner el foco en lo que sabe hacer mejor.

En la misma línea, se necesitan más espacios colaborativos, donde cada persona, en su especialidad, desde su profesión y experiencia pueda aportar, y generar una sinergia entre los distintos profesionales para entre todos poder crecer y mejorar.

En el fondo, un espacio donde los emprendedores ya consolidados y los emergentes puedan compartir conocimientos, transferir experiencias y generar nuevos aprendizajes. En nuestra universidad contamos con una Oficina de Transferencia Tecnológica que, precisamente, pretende apoyar a las personas en su intención de poner en marcha una idea de negocios, iniciativa financiada por el Fondo de Innovación y Competitividad del Gobierno Regional de Los Ríos, siendo ésta una de las acciones que ha impulsado la Universidad Santo Tomás Valdivia en esa línea.

Al lado de la librería Estrellita, ubicada en avenida Picarte 521, Valdivia, se puede ver unas estructuras verticales llenas de plantas y flores. Esa técnica, que mezcla la arquitectura con las plantas, se llama Jardines Verticales (ver recuadro) y en Valdivia, los realiza Daniela Calvo Cabello, egresada de Agronomía de la Uach, con su empresa "Vivero y paisajismo Sempervirens".

"Yo soy de Santiago, nacida y criada allá, me vine a estudiar Agronomía a Valdivia. Formé familia acá, y me enamoré de esta ciudad y no vuelvo a Santiago, más que para ocasiones especiales", dice la ingeniera agrónoma.

¿Por qué eligió ese nombre para su empresa?

-Sempervirens quiere decir siempre verde en latin, y tiene relación con la característica especial de algunas plantas de mantenerse siempre de color verde y me gustó el nombre.

¿Cómo se gestó la idea de hacer jardines verticales?

-Bueno, mi papá tenía un vivero de plantas ornamentales en Santiago y por ahí comencé a sumergirme en este mundo de las plantas, jardines y paisajismo. Siempre me llamó mucho la atención eso.

Tanto que decidí estudiar Agronomía en la Uach, y cuando egresé, postulé y me gané un Capital Semilla de Sercotec para hacer mi vivero con sistema de riego e infraestructura.

Sin embargo, el tiempo de cultivo de una planta es relativo, y el retorno monetario no es inmediato, sino que puede demorarse entre dos a tres años, decidí dedicarme al paisajismo, que es el diseño de áreas verdes.

Investigando en Internet, averigüé acerca de los jardines verticales. En forma autodidacta empecé a investigar y para probar, hice mi propio jardín vertical, para probar las plantas y la estructura.

Otra de las razones por la que decidí dedicarme a esto, fue porque soy mamá de dos niños, unos de 11 y otro de cinco años. Quería tiempo para ellos.

¿Qué tipos de plantas ocupa en un jardín vertical?

-Por lo general, yo uso plantas que son perennes como cubresuelo, que muchos de ellos dan flores. También se pueden ocupar algunas plantas de temporada, pero tienen que cambiarse cada ciertas semanas por estación. Además de los cuidados básicos que tienen que tener las plantas como es el riego diario y la poda.

¿Cómo va imaginando el diseño del jardín?

-Dependiendo de las plantas y floresque tenga disponibles voy creando la idea de lo que quiero mostrar, combinando colores.

Por supuesto, todo depende del cliente además. Ellos me cuentan sus ideas, y yo los voy asesorando.

¿Cuál es la sensación que quiere dar con estos jardines?

- Bueno, el origen de los jardines verticales viene desde la idea de recrear los jardines de Babilonia, que estaban en altura, con terrazas. Actualmente, es para ocupar de una mejor forma, los edificios y las estructuras de cemento de las grandes ciudades .

¿Cuánto tiempo tiene su empresa?

Un año y medio, y ha sido muy buena la recepción del público en cuanto a que preguntan mucho acerca del tema.

Sin embargo, el valor de mi trabajo a veces no es tan asequible. Pero estamos tratando de realizar trabajos más pequeños como cuadros verdes, para que las personas puedan acceder a ellos.

¿Cuál es su meta para este 2016?

Me gustaría que mi negocio crezca y que haya más personas interesadas en tener ya sea cuadros verdes o jardines verticales en sus casas.

Pero también me gustaría trabajar con las municipalidades o con estamentos de gobierno, para que la ciudad sea más verde y tenga más vida, con una técnica que es muy bonita, además.