Parlamentarios lamentan los continuos errores en el Cau Cau por fraude al fisco en el Juzgado de Garantía
GESTIONES. Desde sus ámbitos de acción, los parlamentarios de la región han estado vinculados al proyecto de construcción del puente Cau, respaldando la iniciativa, pero también fiscalizando para que éste sea terminado. POR CAU CAU. La acción fue interpuesta en representación de la ciudadanía.
Que el término de las obras de construcción del puente Cau Cau no impacte en el presupuesto regional y que las responsabilidades por las fallas sean establecidas y sancionadas por los organismos que correspondan solicitan los parlamentarios de la región, quienes han emprendidos distintas acciones en el marco de su rol fiscalizador.
Los últimos antecedentes que revelan que el Ministerio de Obras Públicas estaba en conocimiento de las fallas que presentaba la estructura y aún así continuaron con el proyecto, aumentaron las críticas y la exigencia de sanciones, tanto penales como administrativas.
Fiscalía
En ese contexto, el senador Alfonso de Urresti se reunió ayer con el fiscal José Morales, de la unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro Norte, que lleva la causa donde se investigan las irregularidades en la construcción del puente Cau Cau.
En el encuentro, el parlamentario por Los Ríos planteó la necesidad de ampliar la investigación e incorporar el último informe técnico contratado por el Ministerio de Obras Públicas, como también los correos electrónicos dados a conocer a través de la prensa y las declaraciones de ex autoridades del Ministerio.
De Urresti expresó que "aquí hay una serie de errores que se deben investigar. Aquí puede haber claramente una prevaricación administrativa y también vemos si hay fraude al fisco, porque no cabe duda a esta altura de la investigación que esto es un escándalo que ha costado más de 22 mil millones de pesos. Es algo sumamente vergonzoso que le hace mal al país".
Además, dijo que "aquí hay una serie de responsabilidades y más que el festival de declaraciones que veremos, existen dos temas prioritarios. Uno es terminar el puente Cau Cau y la otra es sancionar a todos los involucrados".
La investigación de la fiscalía se inició el año pasado tras los antecedentes presentados por el senador De Urresti al Consejo de Defensa del Estado, instancia a la cual acudió por considerar que existían graves daños al patrimonio fiscal, siendo derivados posteriormente los antecedentes al Ministerio Público, dado que existirían eventuales delitos penales.
"Antes de 2005 se hablaba de una obra bastante diferente ..."
En 1990 el Ministerio de Obras Públicas, a través de la Dirección de Vialidad, inició la formulación del primer proyecto para la construcción de un puente levadizo en el río Cau Cau, idea que fue respaldada por la Municipalidad de Valdivia y el alcalde de la época, Bernardo Berger.
La idea no prosperó y en 2001 fue retomada por Berger, en un nuevo período como alcalde de la ciudad, año en que el subsecretario de Obras Públicas, Juan Carlos Latorre, y representantes de la gobernación, la municipalidad y la empresa privada firmaron el primer acuerdo para comenzar el proyecto.
-¿Como impulsor de este proyecto, desde su génesis, qué siente al ver que aún no se concreta?
-Hoy día estamos en una desazón; teníamos la esperanza de que esto ya se hubiese materializado, se suponía que se iba a poner en marcha a comienzos del 2014 y de ahí a la fecha la obra está totalmente abandonada. Por lo tanto, obviamente que eso trae preocupación y sobre todo porque iba a ser un gran adelanto e iba a prestar un gran servicio a la ciudad y a la región, además del desarrollo urbano que iba a generar en los sectores que serían conectados por el puente.
-¿Era tan importante, en ese momento, impulsar un proyecto basculante o era un capricho, como lo señalan algunos dirigentes?
-Hasta antes de 2005, se hablaba de una obra bastante diferente a la que planteó el diseño definitivo, por allá por el 2008; era un puente bastante más liviano, más sencillo. Hasta el año 2005 como Municipalidad tuvimos una relación cercana con el proyecto, después y como ocurre con el Ministerio de Obras Públicas, la iniciativa se centralizó. Siempre se tuvo en mente y con una mirada de futuro, que Valdivia en algún momento podía recuperar su condición de ciudad fluvial y la vocación marítima que tuvo hasta antes del terremoto, también hay que tener presente que es la única ciudad que la cruza un río navegable y que hacia el interior de la comuna, por ejemplo en el sector de Chumpullo está la zona industrial donde se podrían desarrollar distintas actividades vinculadas a la actividad marítima.
-Tras los últimos anuncios del ministro Alberto Undurraga, de plazos, montos y responsabilidades, ¿qué espera usted que suceda con este proyecto?
-Tienen que esclarecerse todas las responsabilidades y obviamente que se pongan sobre la mesa los recursos necesarios; nunca se ha dicho de dónde se van a extraer esos recursos; se piensa que dentro de esos 10 mil millones de pesos adicionales, cinco mil se sacarían de las boletas de garantía de Azvi, pero no olvidemos que eso está judicializado y un juicio de estas características puede tener un tiempo que nadie lo maneja. Disponer de esos recursos y tratar de buscar en el Ministerio el resto del presupuesto no es ninguna certeza. Hay que deslindar las responsabilidades de los hechos ocurridos y, paralelamente, trabajar en un plan "b" para conseguir los recursos y así poner prontamente en marcha la terminación de las obras.
-¿Las administraciones de Piñera y Bachelet deben asumir la responsabilidad de este fracaso?
-Aquí no se trata de echarle la culpa a uno u otro gobierno, como se ha pretendido hacer ver más de una vez, pues desde la primera fallida licitación del 2005 han pasado cuatro gobiernos, pero no hay que olvidar que el Ministerio de Obras Públicas ha sido y es uno solo y el mismo a lo largo de todo este desastroso proceso, la misma estructura, los mismos cargos, y en general los mismos funcionarios. Por lo tanto, acá lo que hay es una responsabilidad de Estado, cuyo mandante de la obra es el Mop que debía cautelar un trabajo que finalmente está mal diseñado, mal ejecutado y mal supervisado y eso es ajeno al gobierno de turno. Entonces lo que compete desde el parlamento es determinar dónde están las fallas de ese trabajo mal habido al interior de la cartera, determinar quiénes son los responsables al interior de ella y, lo más relevante para los valdivianos, clarificar cómo seguimos en adelante.
"Acá lo que hay es una responsabilidad de Estado, cuyo mandante de la obra es el Mop que debía cautelar un trabajo que finalmente está mal diseñado (...)"
"Todos estuvimos vinculados con la necesidad de un segundo puente..."
"Podemos decir que el puente sobre el río Cau Cau comenzó en serio", afirmó en noviembre de 2008 el entonces intendente y actual diputado DC, Iván Flores, cuando se estudiaban las alternativas para la construcción del puente: giratorio, basculante o levadizo. Durante su gestión al mando del gobierno regional, se realizó el estudio preliminar, donde fueron analizadas las condiciones del terreno y se realizaron las mediciones topográficas y de mecánicas de suelos.
-¿Cómo impulsor de este proyecto, como intendente en el período 2007-2009, qué siente al ver que aún no se concreta?
-Soy parte de los que hemos criticado con firmeza desde el inicio, cuando apareció la primera falla. Yo hablé de que habíamos hecho el ridículo mundial, habíamos puesto en ridículo la capacidad ingenieril de Chile, la credibilidad de la institución, la credibilidad del mundo privado respecto de obras con un poquitito más de complejidad. Eso lo dije en enero de 2014, antes de que asuma el gobierno de la Presidenta Bachelet y lo seguimos diciendo después.
-¿Era tan importante, en ese momento, impulsar un proyecto basculante o era un capricho, como lo señalan algunos dirigentes?
-Todos los ciudadanos de Valdivia estuvimos vinculados con la necesidad de un segundo puente a la costa y a la Isla Teja. Desde principios de los '90 ya se empezaba a hablar de ese puente y surgió la idea de hacer un puente levadizo. Nadie quiso plantear una alternativa que fuera distinta, porque había un sueño por parte de la gente de Valdivia de tener un puente único en Chile (...) Yo creo que la palabra no es capricho, la palabra es un sueño.
Debo ser honesto y sincero, cuando nacimos como región y asumí como intendente y me informan que el Ministerio de Obras Públicas con platas del Ministerio y no regionales había decidido zanjar qué se quería hacer y, por tanto, realizar un estudio de pre inversión, llamé al ministro de Obras Públicas de la época, Eduardo Bitrán, le pedí que además de precisar los términos de referencia para un puente levadizo pudieran evaluar económicamente un puente común y corriente para hacer una comparación. Finalmente, no se hizo.
-Tras los últimos anuncios del ministro Alberto Undurraga, de plazos, montos y responsabilidades, ¿qué espera usted que suceda con este proyecto?
-Yo pediría firmeza y rigor respecto de los sumarios administrativos que hoy día la Contraloría está haciéndole al Ministerio de Obras Públicas. Queremos que se haga rápido, necesitamos un segundo puente, un tercer puente y un cuarto puente y ese ha sido el compromiso del ministro Undurraga.
-¿Las administraciones de Piñera y Bachelet deben asumir la responsabilidad de este fracaso?
-Aquí hay tres gobiernos involucrados, recordemos que el estudio preliminar y la decisión de partir con un puente levadizo fue en el primer gobierno de la Presidenta Bachelet. Ese estudio se inició el 2008, se trabajó el 2009, se terminó en 2010 y fue recibido oficialmente en 2011. O sea, cualquier duda que podría haber habido con ese estudio, finalmente tendría que haber sido resuelto entre el 2010 y quienes lo recibieron en 2011. Claramente nosotros partimos con un proyecto preliminar y el gobierno siguiente, del Presidente Piñera, las autoridades nacionales y regionales, consideraron que era suficiente y con ese licitaron y toda la parte de levante no estaba resuelta.
Yo diría que la única responsabilidad que tiene este gobierno es que el subsecretario anunció que en mayo se iniciaba la marcha blanca y no fue, o sea, se apresuró en dar una fecha de término. Por otro lado, pese a que tenía prohibición de firmar, quien era director nacional de Obras Públicas firmó documentos y eso le costó la pega. No hay una responsabilidad respecto de la calidad de la obra, ni del estudio, ni de la recepción del gobierno de Bachelet, todo el procedimiento de la toma de decisiones y obra se llevó a cabo en el gobierno del Presidente Piñera.
"Soy parte de los que hemos criticado con firmeza desde el inicio, cuando apareció la primera falla. Yo hablé de que habíamos hecho el ridículo mundial".
Alcalde presentó querella
En el Juzgado de Garantía de Valdivia el alcalde Omar Sabat presentó ayer una querella contra quienes resulten responsables, tras los últimos antecedentes conocidos respecto de las fallas en la construcción del puente Cau Cau.
La acción judicial fue interpuesta bajo la figura de fraude al fisco y en representación de la ciudadanía. "Creemos que aquí se tiene que investigar hasta el final, es por eso que como ciudad y en representación de la comunidad valdiviana hemos interpuesto esta querella", explicó el alcalde.
Agregó que: "Aquí hubo funcionarios públicos que supieron los problemas, sabían que en el puente se utilizaron materiales que no correspondían a los que se debían utilizar; en algunos casos, como las rótulas y el acero, ni siquiera se puede establecer el origen de esos materiales. Aún así, siguieron con el proyecto y, lo que es peor, con las maniobras que provocaron esta falla".
Antecedentes
Sabat y su equipo jurídico acompañaron la querella de una serie de antecedentes. "La primera denuncia que nosotros hicimos como municipalidad fue en junio de 2014, por un informe de Contraloría que indicaba que los materiales de construcción no eran los que estaban garantizados por base y que no tenían procedencia, como la soldadura o el acero", afirmó.
Además, recordó que en febrero de 2015 denunció que las cuatro rótulas no eran originales "y eso desató una cadena de situaciones y complejidades en el puente Cau Cau que finalmente provocó que, cuando lo hicieron funcionar, hubo roturas de algunas piezas del sistema de levante", dijo.
Al respecto, señaló que hay antecedentes suficientes para investigar a las empresas que han estado a cargo de la construcción de la estructura basculante, así como al interior del Ministerio de Obras Públicas, con el objetivo de establecer las responsabilidades.
En ese sentido, dijo que "cualquier investigación que se realice bajo diferentes líneas, por ejemplo los mil 800 millones de pesos que fueron entregados a la empresa hace un par de años para mejorar el sistema de rótulas; hay que investigar también el por qué no hubo fiscalizaciones como corresponde en los materiales y además la fiscalización y la investigación en el diseño del puente".
En esa línea, la autoridad comunal enfatizó en que las fallas del Cau Cau responden a responsabilidades compartidas y señaló que "nadie puede lavarse las manos (...) no es posible que el Ministerio de Obras Públicas esté peloteando la información hacia las empresas y éstas hacia el Ministerio".
Diligencias solicitadas
En la querella por fraude al fisco interpuesta al mediodía de ayer por el alcalde Omar Sabat y su equipo jurídico, la Municipalidad de Valdivia solicitó la intervención del correo electrónico del último inspector fiscal del proyecto, Walter Wilson; la exhibición de todos los informes contratados por el Ministerio de Obras Públicas, relacionados con el puente Cau Cau y la toma de declaraciones a cinco trabajadores del Mop, Azvi y la empresa asesora a la Inspección Fiscal, Zañartu Ingenieros Consultores.
15.767 millones de pesos era el presupuesto inicial destinado para las obras de construcción del puente Cau Cau, con un plazo de ejecución de 900 días.
50 pruebas de levante por el lado norte del puente (Las Ánimas) y 35 por el sur (Isla Teja) se realizaron entre junio de 2014 y febrero de 2015, más 12 pruebas simultáneas.
10 mil millones de pesos adicionales, aproximadamente, costaría la reparación del puente Cau Cau, según informó el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga.