Unos 6 mil buses del Transantiago no saldrán a las calles por paralización
DEMANDAS. Trabajadores de algunas operadoras del sistema exigen mejores sueldos y condiciones de trabajo.
Un grupo que sobrepasa los 10 mil trabajadores de las empresas Alsacia y Express, operadoras del Transantiago, se plegarán hoy a un paro de actividades debido a la compleja situación económica que atraviesan. Se estima que aproximadamente 6 mil máquinas no estarán operando durante la jornada.
El subsecretario de Transportes, Matías Salazar, dijo que el Gobierno ya maneja alternativas para responder a los requerimientos y demanda de la ciudadanía.
"Estamos adoptando un conjunto de medidas y un plan de contingencia para lo que va a ser esta anunciada movilización", sostuvo la autoridad citada por radio ADN.
"Esto será parte del esfuerzo del personal policial de algunos terminales y del personal del sistema de transporte", agregó.
"Además hemos coordinado con las empresas que se adopten medidas especiales para asegurar la continuidad operacional de los servicios de transporte público. Y sin perjuicio de eso, estaremos desde muy temprano, a partir de cerca de las 6 de la mañana, monitoreando el funcionamiento del transporte público y, además, adoptando aquellas medidas en virtud de las acciones que cometan estos trabajadores", comentó.
Los servicios que se verían afectados serían los 100 y 400, que inician sus recorridos en la zona oriente de la capital y que finalizan en las comunas de Maipú y Pudahuel.
El origen
La situación se originó hace algunos días cuando la operadora Alsacia, que maneja 35 recorridos del Transantiago con esta razón social y otros 58 por medio de Express, informó que no pudo cancelar los abonos a los acreedores estadounidenses que asumieron una deuda total de US$ 347 millones, lo que dificulta su funcionamiento en Chile.
Choferes de Subus, en proceso de reorganización financiera debido a sus deudas, también se integrarán a la movilización por mejores salarios. La empresa, cuyos buses recorren 10 comunas en Santiago, se acogió a la nueva ley de quiebras por una deuda de US$ 180 millones con entidades internacionales.
El dirigente gremial Juan Carlos Rubilar aseguró que "el paro se debe a las condiciones laborales que están sufriendo todos los conductores del Transantiago". Por ejemplo, citó las malas condiciones de los buses, que no permiten trabajar en un ambiente laboral óptimo.