Mejoramiento del estadio
El Torreón volverá al Parque recién en octubre. Es de esperar que en esa ocasión se cuente con todas las tribunas. Es obligatorio caminar sobre un barrizal propio de la peor cancha de barrio.
Recién a comienzos de octubre debe producirse el regreso de Deportes Valdivia al estadio del Parque Municipal, oportunidad en que recibirá al otrora poderoso, pero aún admirado Cobreloa, por el campeonato oficial de la Primera B.
Este fin de semana no habrá actividad en el fútbol profesional, en ninguna de sus categoría, por la celebración de Fiestas Patrias, y en la fecha siguiente el cuadro del Torreón debe desplazarse hasta Chinquihue para enfrentar a Puerto Montt, en lo más parecido a un clásico regional que deberá atender por la presente temporada.
Nos interesa volver a lo que ocurre con el reducto donde el equipo valdiviano actúa como dueño de casa, porque a pesar del tiempo transcurrido desde el día en que el conjunto logró el ascenso a Primera B, específicamente el 8 de mayo, y de los anuncios hechos en torno al imprescindible mejoramiento del estadio, todavía no se ha podido contar con un recinto en condiciones adecuadas a las exigencias propias de una actividad que en casi todo el resto del país exhibe escenarios cómodos, seguros y modernos.
En Valdivia, en cambio, todavía no es posible utilizar el aforo completo, aunque el domingo pasado resultaba evidente que los trabajos de reparación de las graderías del sector de la calle Pedro Montt ya estaban concluidos, pero una vez más no recibieron público por temas administrativos.
Además, para llegar a las aposentadurías habilitadas es obligatorio caminar sobre un barrizal propio de la peor cancha de barrio y de otra época, porque hoy es frecuente ver que en el terreno amateur hay preocupación por competir en las mejores condiciones. Además, hay otros detalles que con buena voluntad pueden seguir soslayándose.
Es necesario reiterar que mientras la región no cuente con un estadio definitivo, acorde a los estándares aplicados en el resto del territorio, se hace urgente mantener el actual recinto en las mejores condiciones posibles, por respecto a espectadores que pagan valores similares a los que se registran a lo largo del país.