Riguroso, profesional y dedicado a la belleza de la mujer valdiviana, Israel Barrera es estilista profesional y dueño del Salón Israel, ubicado en calle Aníbal Pinto. "Estudié enseñanza básica y media en Valdivia. Luego decidí que lo mío era la peluquería. Mi familia está ligada a la belleza en Valdivia, mi padre es un peluquero bien reconocido en Valdivia. Es un barbero de los pocos que quedan desde que se inició este rubro en la región".
Estudió peluquería en Santiago, ciudad donde también tuvo la oportunidad de trabajar en un salón del sector alto, donde "llegaba la socialité santiaguina: El Salón Belles. La exigencia es bastante, siempre con lo último en tendencias. Me encantó".
¿Cuánto tiempo lleva en Valdivia?
-Soy propietario del Salón Israel entre ocho a nueve años. He tenido un trabajo intenso y he estado en diferentes peluquerías. Al principio sin duda, fue muy complicado, especialmente cuando me fui de Valdivia, y dejé a mi familia y amigos. En Santiago estuve como seis años trabajando mucho, también en Puerto Montt y Osorno. Asimismo he participado en desfiles con Patricio Araya y recibí certificación internacional de Wellart.
¿Qué ha significado para Ud. ser peluquero?
-Es la profesión más espectacular, y tengo una gran relación con mis clientas, aunque también atiendo hombres. Yo soy un amante del color, el peinado y el corte. Me encanta todo.
¿Cuáles son las tendencias actuales?
-Siempre están pidiendo lo último en moda. Lo que último que se viene, son las famosas "balayage", concepto francés y que se refiere a un color que va desde la raíz con lo natural, y que se va desgastando hacia las puntas. Está bastante de moda. En todo caso, hoy en día no existe nada que marque la tendencia, ya que cada persona es libre. Recuerdo que antiguamente las mujeres llegaban a los cuarenta años y estaban locas por cortarse el pelo. Hoy en día, ella es libre, quiere verse y sentirse bien. Saben lo que quieren, con seguridad e independencia en sus decisiones. Nosotros las entendemos y queremos que se vean bellas.
¿Asesoran Uds. a sus clientas?
-Lo primero que hago es escucharlas, porque debo impregnarme de lo que ellas quieren. Luego converso con cada una y las asesora de acuerdo a lo mejor le quede a su cabello. Yo prefiero naturalidad que el exceso.
¿Cuál es la moda en color?
-La mujer valdiviana tiene que atreverse un poco más. Ellas siempre buscan colores fríos como el ceniza, y uno debe destacarse con otras elecciones y sobresalir. Nosotros hacemos tonos más cálidos, como los dorados. Por ejemplo, el balayage, que de un color natural se va haciendo una armonía a uno desgastado. Va unido y entrelazado lo natural con la coloración. De menos a más. Además, cada vez más la mujer está buscando lo natural y cuidándose mucho más, eligiendo también mejores productos.
¿En corte que sugiere para esta temporada?
-Estuve en un seminario en Santiago con un especialista en corte proveniente de Asia y las tendencias que traía eran cabellos más cortos, pero si me preguntan a mí yo los voy haciendo a la medida de las facciones de las personas. Hay cortes que, por mucho que estén de moda, a veces no van con cada una de ellas. Yo observo mucho a mis clientas antes de comenzar mi trabajo.
¿Se siente un emprendedor?
-Es difícil, yo era un trabajador que quise independizarme y llevar un concepto distinto al que se realizaba en Valdivia, junto a un trabajo más personalizado.