Al acoger la Corte de Apelaciones de Valdivia el recurso de protección interpuesto por los vecinos del sector de Teja Norte, en relación al nivel de ruidos que deben soportar cada vez que se realizan actividades en el Parque Saval, ha dado inicio a la regulación que tanta falta estaba haciendo, pero no solo en el recinto de Isla Teja, porque hay reiterados momentos en que también el centro de la ciudad se ve afectado por el problema de la contaminación acústica, lo que en apariencia no quita el sueño a nadie.

Sin embargo, en cuanto las condiciones meteorológicas resultan favorables, en torno a la costanera y al perímetro central de Valdivia es posible comprobar que el nivel de ruidos, del más diverso tipo, llega a ser insoportable y por períodos muy extensos.

La situación llega a su punto máximo a lo largo del verano, porque todos los días quienes viven o trabajan en las inmediaciones deben aprender a poner lo mejor de su voluntad para soportar la carga sonora que proviene de manifestaciones musicales, que obviamente actúan bajo los parámetros que ellas mismas se imponen, pero también hay que agregar a otras expresiones que nada de musical tienen.

La resolución del alto organismo judicial obliga a la municipalidad a disponer de fiscalizadores para ejercer controles sobre los niveles del sonido emitido en el recinto del Parque Saval, lo que ha sido bien recibido por los recurrentes, quienes han manifestado que no está en su ánimo impedir la realización de espectáculos o reuniones que impliquen el empleo de música.

Ahí hay una clave para entender la situación. No se trata de suspender las actividades, porque cada una de ellas carga un contenido plenamente aceptables, pero las cosas cambian cuando se llega a un punto que solo puede ser calificado de contaminante.

Es necesario que en Valdivia, en cualquiera de sus puntos, pueda convivir el deseo de manifestarse de forma pública con el derecho a vivir o trabajar dentro de los márgenes que la salud permite. Eso no es tan difícil de conseguir.

30 años | 1 de noviembre de 1986

Guerra del Loco continúa sin treguas ni descansos

El descaro con que actúan los traficantes es la principal característica de la llamada Guerra del Loco, que tiene a la provincia de Valdivia entre sus escenarios más recurridos. En el río Cau Cau y en un negocio de Mehuín se produjeron los últimos hallazgos del producto envasado y listo para la exportación ilegal.

20 años | 1 de noviembre de 1996

Trabajadores municipales molestos con fin del paro

Su molestia por el criterio empleado por la directiva nacional de Asemuch para llegar a acuerdo con el Gobierno y poner fin a la paralización de actividades, manifestaron los trabajadores municipales de Valdivia. Dicen que la decisión fue adoptada sin consultar a las bases y por no haber logrado lo que se pedía.

10 años | 1 de noviembre de 2006

Gremios del agro alzan la voz por el tipo de cambio

El sector agropecuario y los exportadores en general continúan sufriendo los efectos del bajo nivel del tipo de cambio. En Valdivia, representantes de los gremios del agro se sumaron a las quejas de varios sectores, que mostraron cifras alarmantes. Unos de los rubros más afectados es el de la lechería, a pesar de sus inversiones.

En diciembre de 2013, el Tercer Tribunal Ambiental de Valdivia comenzó su actividad judicial. Jueces independientes y conocedores de las materias debían resolver, en un espacio racional y democrático, las disputas que se produjeran entre la región del Biobío y la de Magallanes y de la Antártica Chilena. Estos jueces, conscientes de las distancias, de los costos, y de la creciente necesidad de acceso a la justicia que la ciudadanía requería para resolver sus problemas, decidieron adoptar una serie de medidas, entre ellas dos a las que me referiré hoy.

La primera de ellas fue realizar, en ciertos casos, diligencias y actuaciones judiciales fuera de Valdivia. Un ejemplo de esto son las audiencias de alegatos -espacio donde los jueces escuchan las alegaciones de quienes representan a las personas e instituciones en conflicto-.

De esta forma, el Tribunal -y no las personas que buscan solución a sus problemas-, se traslada a los lugares donde se origina el conflicto, según sea la relevancia del tema, el tipo y complejidad del asunto, la capacidad económica de las partes, la distancia, u otras consideraciones. Concepción fue el primer lugar donde el Tribunal se trasladó para realizar una audiencia.

La segunda medida fue adoptar un sistema electrónico de gestión de los juicios (o causas). De esta forma las y los abogados podían presentar sus escritos a través de Internet; sin la necesidad de presentar materialmente sus escritos en la sede del Tribunal. Así, una abogada de Chile Chico podía enviar desde esa localidad un escrito al Tribunal.

Pronto inauguraremos un nuevo sistema que facilitará aún más el trabajo de las y los abogados, así como permitirá a la comunidad interesada conocer con mayor detalle cada uno de los juicios que son resueltos por el Tribunal. Los invito a visitar nuestra página web www.3ta.cl

El Tercer Tribunal Ambiental de Valdivia, siendo de reciente creación, ha dado importantes pasos hacia facilitar el acceso a la justicia. Uno de nuestros propósitos es brindar a la ciudadanía un servicio imparcial, de calidad y oportuno, en la solución de las controversias ambientales. Usted puede contar con eso".

Michael Hantke Domas Ministro presidente Tercer Tribunal Ambiental