En una sociedad moderna, que busca la calidad de vida de todos sus integrantes, pocas situaciones son tan molestas como la ausencia de extracción de desechos, como la que estamos soportando los chilenos, en mayor o menor grado, debido a la paralización de los trabajadores encargados de esta labor.

No vamos a discutir la legitimidad o su carencia, en el caso del paro de los trabajadores del sector público, porque cada ciudadano debe tener su opinión al respecto, y porque lo que nos interesa es pedir que se allanen los caminos para que en las calles y los hogares no se siga agravando el problema de la acumulación de basuras, con sus habituales consecuencias.

Traemos la situación a Valdivia, una ciudad que se caracteriza por su limpieza urbana, hecho que con frecuencia es destacado por los visitantes que llegan atraídos por los indiscutibles atractivos de la región de Los Ríos, a partir de su capital, de la que resaltan la higiene en los espacios públicos a la par de la tranquilidad que encuentra, sobre todo cuando se trata de turistas que llegan desde las ciudades más grandes del país, donde mantener la limpieza dentro de los márgenes de lo exigible se hace más difícil.

Se sabe que se cuenta con la disposición de las autoridades para aliviar las penurias de una población que quiere alejar el tormento que implica estar sin retiro de desperdicios por tantos días, porque entre otras cosas implica la llegada de roedores, un tema muy sensible en los sectores aledaños a la zona rural, que en la zona significa densa vegetación.

Es por ello que resulta muy molesto que el diálogo entre autoridades, que debiera ayudar en la búsqueda de una salida, quede trunco porque el Servicio de Salud no puede entregar una notificación que conmina a encontrar soluciones, porque en la municipalidad no hay nadie que pueda recibirla, precisamente por estar su personal en paro.

Este círculo vicioso motiva reacciones políticas que pueden resultar muy entretenidas para los participantes, pero hoy la gente quiere otra cosa.

30 años | 16 de noviembre de 1986

Piden que retén de Niebla tenga el rango de tenencia

Representantes de la comunidad de Niebla pidieron al alcalde de Valdivia que interceda para que sea elevado al rango de tenencia el actual retén de Carabineros del sector de la costa. Además, solicitan que el inmueble policial sea mejorado sustancialmente, porque hasta ahora se encuentra en deplorables condiciones.

20 años | 16 de noviembre de 1996

Insisten en anexar Liquiñe y Coñaripe a la Araucanía

En la región de la Araucanía fue creado un organismo llamado "Comité Nueva Provincia Cautín Sur, Pensando en el Siglo XXI", que entre sus propuestas incluye la anexión de las localidades de Coñaripe y Liquiñe, actualmente en la comuna de Panguipulli, donde de inmediato ha habido reacciones en contra de la idea.

10 años | 16 de noviembre de 2006

Listas para sus huéspedes están las balsas para lobos

Dentro de diez días estarán terminadas las balsas que servirán para acomodar a los numerosos lobos marinos que ya se convirtieron en parte del paisaje valdiviano. Para impedir que los animales se acerquen demasiado a las personas, con el riesgo de modiscos, se espera que pasen mucho tiempo sobre las balsas.

Indudablemente, los conflictos ambientales son complejos, así como también lo es el paradigma del desarrollo sustentable. Como están compuestos por varias temáticas, no se pueden resolver de la mejor forma los primeros, o alcanzarse en su grado máximo el segundo si se enfrentan desde una sola perspectiva.

Esta realidad fue acogida por el legislador al crear los Tribunales Ambientales, ya que la Ley 20.600 ordenó que fueran de integración mixta, con jueces abogados y licenciados en ciencias y señaló expresamente que deben contar con profesionales del ámbito económico y científico. Con estas disposiciones se aseguró un tratamiento multidisciplinario de los conflictos ambientales que los Tribunales Ambientales deben resolver, pero cabe preguntarse si es esto suficiente.

¿Por qué?, Porque un marco multidisciplinario sólo garantiza que distintas disciplinas o especialidades se combinen o involucren en el análisis de un tópico determinado. La interdisciplina por su parte agrega el compromiso de traspasar los límites de cada fuente de conocimiento a través del pensamiento transversal; pero es finalmente la transdisciplina el enfoque que incluye la interacción metódica de diferentes especialidades para resolver problemas que sean comunes a todas ellas.

En la Historia de la Ley 20.600 esta distinción no es abordada. Tampoco permite inferir claramente un mandato u orientación hacia el trabajo transdisciplinario. No obstante esto, la conjugación de factores sociales, judiciales, ambientales y económicos en los casos que deben resolver estos tribunales, justifica ampliamente que sea éste el marco aplicable más idóneo.

Por ello no sólo hemos trabajado en las decisiones propias del tribunal, sino también en la búsqueda de una metodología que permita que nuestra labor sea una genuina muestra de transdisciplina, apuntando a la conceptualización común de la problemática relevante, la transferencia de conocimiento para la co-creación de ideas orientadas a la solución y la integración o aplicación de estas nuevas ideas a los casos a resolver.

Con ello hemos experimentado el gran esfuerzo requerido para que el trabajo transdisciplinario se desarrolle como una práctica metodológica habitual, pero así como se dice que el viaje es tan importante como el destino al que se desea llegar, el aprendizaje obtenido es tan relevante como los resultados alcanzados en estos primeros años de trabajo jurisdiccional.

Sibel Villalobos Volpi

Ministra Tercer Tribunal Ambiental