El problema de ruidos que han sufrido los vecinos de Isla Teja Norte, generado por las actividades que se desarrollan en el Parque Saval, ha mostrado un problema frecuente y que nadie quiere asumir. Utilizar sistemas de amplificación sonora a veces nos lleva desde la música al ruido, desde la cultura a la contaminación, desde el deleite de los sentidos al riesgo para la salud. Este es un problema que no debiera existir en una ciudad que se reconoce como Capital Cultural.

Una amplificación sonora de calidad implica también un volumen apropiado. Como ejemplo, podemos imaginar disponer de un foco muy potente, y para una correcta iluminación, cuidaremos su intensidad para evitar encandilar a todo el mundo. Un exceso de energía luminosa no permite apreciar colores ni detalles, finalmente distorsiona lo que ilumina. Lo mismo sucede con la amplificación sonora: demasiada energía transformará la música en algo desagradable, yademás, totalmente perjudicial para la salud. No sólo para los vecinos, sino también para los asistentes al evento.

Ya sea en el Parque Saval, en casas de comercio (típicamente en el centro de la ciudad) o en la vía pública (plazas, paseos y veredas), el empleo indiscriminado de potencia acústica genera problemas con todos los vecinos: casas, oficinas y transeúntes. En verano son frecuentes los reclamos de personas que trabajan en el centro de Valdivia, casi condenadas a escuchar a gran volumen, todos los días,un mismo repertorio musical, una y otra vez. Similar situación para los vecinos de la zona del Helipuerto o la Costanera.

La Corte Suprema ha reconocido el riesgo para la salud de los vecinos, y la responsabilidad municipal en el caso del Parque Saval. Pero no es el único caso. El municipio tiene la oportunidad permanente de hacer valer su ordenanza de medio ambiente que prohíbe reproducir música a un volumen que trascienda al exterior de un establecimiento (Art. 34), hacerlo extensible a las autorizaciones que otorga (Art. 33) y a sus propias actividades (como en el Parque Saval). Valdivia debe buscar lugares apropiados para distintos tipos de eventos, con espacios y edificaciones adecuadas acústicamente para estos fines. Queremos música, pero no ruido.

Dr. Enrique Suárez Instituto de Acústica, Facultad de Ciencias de la Ingeniería, UACh

30 años | 17 de noviembre de 1986

Remodelación de la Feria Fluvial despierta alegrías

Con una inversión de tres millones de pesos se desarrollan los trabajos de remodelación de la Feria Fluvial, lo que ha despertado satisfacción tanto entre los comerciantes como entre quienes son los habituales clientes. Serán instalados puestos de venta de pescados, mariscos y productos de la tierra, terminando con el caos que aún impera.

20 años | 17 de noviembre de 1996

Delincuente se tragó joya para impedir su detención

Un joven robó una valiosa joya a una mujer en el centro de Valdivia, pero al verse acorralado por Carabineros no encontró nada mejor que tragarse la gargantilla de oro con incrustaciones de circones y una esmeralda. Ahora está detenido, pero no se sabe si esperarán que devuelva la joya de manera natural o si optan por operarlo.

10 años | 17 de noviembre de 2006

Ya circula un nombre para la intendencia de Los Ríos

Inquietud ha provocado en la comunidad valdiviana que el nombre del actual intendente de Los Lagos, Jaime Bertín, haya comenzado a circular como probable máxima autoridad de la futura región de Los Ríos. Me parece insólito, dijo el diputado Roberto Delmastro, y el alcalde Bernardo Berger pidió no repartir cargos todavía.

Nuevamente se ha puesto en marcha la campaña que organiza la empresa Correos Chile, con el objeto de recolectar algunos presentes que serán entregados a niños de escasos recursos durante la fiesta navideña.

Es una iniciativa que se realiza a nivel nacional, pero que en el territorio de la región de Los Ríos ha encontrado generalmente satisfactorias respuestas por encontrarse bastante arraigada en una población muy sensible frente a estas situaciones y que se manifiesta de manera bastante transversal en torno a la situación socioeconómica de quienes se preocupan de hacer llegar aportes.

La campaña toma cuerpo a partir de las solicitudes que los pequeños hacen llegar a Correos Chile a través de cartas. En ellas se encuentran pedidos típicamente infantiles, apuntando al deseo de conseguir un juguete, pero también se presentan situaciones muy conmovedoras, como las que se refieren a requerir un trabajo para alguno de los progenitores.

"Entrega esperanza" es el nombre con que se ha caracterizado la cruzada durante esta temporada, bajo el precepto de encontrar personas generosas y dispuestas a colaborar con las familias que no están en condiciones de hacer los tradicionales regalos que en importante medida han terminado por convertirse en la razón de ser de la festividad.

La iniciativa nació porque hace un cuarto de siglo un cartero se sintió conmovido con las numerosas misivas que llegaban a la empresa en los días precedentes a Navidad y que en su mayoría no contaban con destinatario, lo que las hacía ir a engrosar los estantes reservados a la correspondencia sin destino.

Ese detalle, el que la campaña haya nacido por inspiración de trabajadores, ha servido para contar con una mayor cantidad de adherentes, que se han encargado de aportar cada año un obsequio para aproximadamente 30 mil niños en todo el país.

"Entrega esperanza" ya está en marcha y lo que sigue es que los potenciales padrinos lleguen hasta las oficinas de Correos, Chile frente a la Plaza de la República, y se hagan cargo de una carta.