"La famosa frase del presidente de Ejecutivo de Codelco (Nelson Pizarro) 'no hay ni un puto peso' se derrumbó con los informes…"
Diputado Juan Luis Castro
"Yo no tengo días malos, porque no soy mujer…"
— Pdte. de Rusia Vladimir Putin — En entrevista con Oliver StoneEn la Región de los Ríos, muchas veces discutimos sobre la forma en la cual debemos desarrollarnos, desde todo ámbito. Nos preguntamos cuáles son los espacios estratégicos que dan cuenta de lo que somos, cuáles son las inversiones que requerimos, cuáles son los territorios con vocación y cómo es esta vocación. Todas esas definiciones son estériles si no trabajamos paralelamente en la formación de una ciudadanía que mire a la región con ojos de futuro, enfoque integral y creatividad para enfrentar los desafíos.
En esa línea, es un deber regional incorporar en la formación de nuestros niños y jóvenes la ciencia, tecnología e innovación. Innovar en una sala de clases por ejemplo, no significa solamente utilizar herramientas tecnológicas o nuevas metodologías pedagógicas. Innovar tiene que ver también con incorporar a los estudiantes, de manera temprana, en un ecosistema que responde a desafíos reales de la sociedad, que está conectado con las problemáticas sociales que aquejan a nuestra gente, que es dinámica en cuanto al desarrollo de sus personas y que incorpora valores fundamentales para avanzar, como lo son la sustentabilidad y el cambio climático, por ejemplo.
Programas como Cultura CTI Los Ríos, apoyado por Corfo y ejecutado por la Universidad Austral de Chile, ayudan enormemente a lograr estos objetivos, porque entregan a los niños y jóvenes bases para pensar creativamente, generar nuevas soluciones apoyados por la tecnología y finalmente, a ser innovadores y valientes en la implementación de los resultados que este proceso tiene. Desde el aula, se conectan virtuosamente los distintos actores que conforman una sociedad: lo público, lo privado, la sociedad civil, el entorno y la academia. Los niños toman para sí una forma de generar conocimiento, pero los académicos aprenden también a encontrar nuevos lenguajes que traducen más acertadamente los llamados que hoy se hacen desde distintas veredas.
Lo importante es no olvidar que le llamamos cultura, es decir, que esta manera de hacer tiene que transformarse en una costumbre arraigada en cada colegio, docente y estudiante de Los Ríos, una tradición que se sienta propia, y que entrega una marca distintiva.
Si la cultura de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación entra en el ADN regional, sin dudas, nos destacaremos como una región que ha sabido diferenciarse.
Pablo Díaz Barraza.
Director de Corfo Los Ríos
Pérdidas cuantiosas dejó el incendio ocurrido hace pocos días en el laboratorio Leüfulab del proyecto InnovING 2030 desarrollado por la Facultad de Ciencias de la Ingeniería de la Universidad Austral de Chile, en el campus Miraflores. Se ha hablado de más de 100 millones de pesos en equipos y materiales, utilizados para el trabajo con estudiantes, pero podría avaluarse en más, una vez que se terminen de cuantificar los daños.
Sin dudas se trata de una mala noticia. Sin embargo, las múltiples reacciones de apoyo y el mismo espíritu expresado por los responsables de la unidad, hacen pensar en una reposición rápida de la labor y los planes que ahí se llevaban adelante, vinculados con la modernización de las acciones académicas, pero también con el desarrollo regional y las economías creativas.
Esto último se verifica a través del apoyo a seis proyectos ganadores del Desafío InnovING 2030 (concurso que es parte del Proyecto Ingeniería 2030), que se desarrollaban en el lugar: uno para el diseño de una nueva mezcla asfáltica, utilizando residuos de la producción de celulosa; otro para un sistema de medición acústico para smartphone; una máquina de acabado superficial para impresión 3D; una máquina termocicladora de dientes; la generación de energía térmica a través de residuos biológicos y el planeamiento de la cirugía con impresión 3D.
Además, en el mismo lugar se efectuó la iniciativa "El Finde", destinado a apoyar a emprendedores jóvenes y cuya segunda etapa está programada para el 16, 17 y 18 de junio.
La idea es que esas iniciativas -que cuentan con financiamiento del gobierno regional a través del Fondo de Innovación para la Competitividad- no se pierdan, ni se demoren. Las autoridades regionales y universitarias han comprometido sus respaldos para que sean restablecidas a la brevedad, acondicionando otros espacios adecuados para ello.
La inversión total en el programa alcanza a los $3 mil 400 millones, pero lo más importante no tiene que ver con los montos, sino con las capacidades humanas que se estaban formando y con la prueba de resiliencia que el incendio dejó planteada.
Los actores Cecilia Cucurella, Osvaldo Silva. Fedora Klivadenko y Naldy Hernández, fueron parte del elenco que presentó en Valdivia la obra teatral "No hay que llorar", producida por Mario Delgado. La actuación se efectuó en el teatro de la Universidad Austral y el público entregó respaldo a la alta calidad del espectáculo.
Las voluntarias de las Damas de Rojo celebrarán hoy el 30º aniversario de su institución, que en Valdivia cuenta con 21 socias dedicadas a apoyar a los enfermos de escasos recursos, en el hospital base. La directiva actual está formada por Rosa Barra, Elizabeth de Gálvez, Albertina Betancur, María Luisa Vargas y Julia Buroliles.
Falabella, tienda ancla del nuevo mall de Valdivia, abrirá sus puertas esta semana, con una ceremonia encabezada por Juan Cuneo, vicepresidente de la empresa. La gerenta del local es Claudia Sepúlveda, quien destaca la contratación de 30 personas de la zona para atender el moderno recinto de 6 mil metros cuadrados, en tres pisos.