En la librería Qué Leo se realizó el lanzamiento para público local de "El deseo invisible. Santiago cola antes del golpe" (Editorial Cuarto Propio). Es el primer libro de Gonzalo Asalazar, quien describe la realidad gay de la capital entre 1950 y los primeros años de la década de 1970.

La apuesta del autor es por la reconstrucción de aquellos años de bohemia, de la vida cotidiana y de la opresión social que llegó con el golpe de Estado. "Hace diez años este libro habría sido mucho más underground. Vivo en mi contexto y en el espíritu de mi época, por eso mi propia experiencia tiene que ver con los procesos que está viviendo Chile, por eso es que sentí la necesidad de reivindicar el deseo homoerótico en la historia nacional", explica.

Proyección

Aunque la investigación solo es sobre Santiago, el autor también busca extender el análisis hacia el resto del territorio: "Mi intención es motivar a que las regiones también elaboren sus memorias cola. Siento que es algo que está mucho más invisible ya que las grandes ciudades te dan la calma del anonimato, lo que te permite vivir tranquilo. No así en las provincias donde el poder del rumor hace que termines ocultando tus preferencias sexuales".

En el teatro municipal Lord Cochrane se cumplió ayer el cuarto día de funciones y el quinto día de actividades del Festival de Danza Contemporánea Junto al Río. La actividad que por octavo año reúne en Valdivia a compañías de todo Chile suma hasta el momento aproximadamente mil espectadores que han asistido a las galas y participado en las clases abiertas y presentaciones en el Club de la Unión.

"No hay espacios para la danza en Chile y por eso vamos por buen camino ya que no solamente nos respaldan los coreógrafos y elencos destacados de Santiago al reconocernos como una vitrina para el sector, sino que también la audiencia", explica Ximena Schaaf, directora del festival y de la Escuela de Danza Valdivia, responsable de la jornada.

El certamen es financiado con recursos del Fondart Regional y anoche tuvo uno de sus puntos altos con la presentación de once montajes de pequeño formato. Fueron seleccionados de entre 30 inscritos, destacando los locales de Mad House Crew con "Mad house 12", Punto 8 Espacio Danza con "Dismórficas", Radiografía Colectiva con "Sostenidos" y la escuela de Danza Valdivia con "Al borde". "Esta modalidad nos permite mostrar a la gente diversas corrientes dentro de la danza contemporánea y también, como ha ocurrido en algunos casos, ver la posibilidad de que esas obras que duran pocos minutos, puedan volver al festival en un formato más extenso", agrega Schaaf.

El festival terminará mañana con las clases de Víctor Vásquez (17 horas, sala de Convenciones) y la última gala (19:30 horas, teatro municipal).

Al tiro. La dura. Me tinca todo el rato. Filete. Estoy raja. Estas son solo algunas de las expresiones a las que debió enfrentarse Gabriela González cuando llegó a fines de marzo del año pasado a trabajar a Chile.

La profesional argentina reconoce que el cambio fue absoluto y que debió rápidamente adaptarse y entender frases y expresiones propias del país. Por ello, comenzó a anotarlas y también el significado según el contexto. La idea la compartió con su amiga uruguaya Estefanía Borges, a quien conoció en Pucón, y juntas decidieron autoeditar "Diccionario weón".

Es un libro de bolsillo, de 72 páginas y contenidos como por ejemplo "Las palabras que más vas a escuchar apenas pises suelo chileno". En esa lista están, por ejemplo "Po" (muletilla para enfatizar la expresión, de uso muy repetitivo. Va al final de la frase y justo antes de weón"; y "Luca" (nada más ni nada menos que mil pesos). "El choque con el idioma fue impactante, pese a que somos países vecinos, me encontré con mucha interferencia en la comunicación. Por ejemplo a pocos días de haber llegado me invitaron a tomar once y claro, me costó entender de que no se trataba de alimentarse, ni precisamente de abordar un vehículo a cierta hora. Lo mismo me pasó en otras situaciones cuando escuchaba el término 'prestar ropa', que tampoco se trataba del ejercicio literal de intercambiar prendas de vestir", dice González.

Hasta la fecha el diccionario es promovido en cada visita que hacen las autoras a distintas ciudades, además de redes sociales y a través del correo electrónico diccionarioweon@gmail.com, donde se pueden reservar copias.