En 2016 y por primera vez en la historia de Chile, la cantidad de estudiantes egresados de Institutos Profesionales (IP) y Centros de Formación Técnica (CFT) fue superior a los titulados en universidades. Según el Ministerio de Educación, el porcentaje alcanzó un 52,6% para los técnicos.
Ese resultado es positivo para el país y se espera que siga creciendo, pues de acuerdo a la Sofofa (Sociedad de Fomento Fabril) Chile presenta un déficit de 600 mil personas con educación técnica para lograr un verdadero desarrollo económico en distintos rubros.
Pero ese avance no es suficiente. De acuerdo a la Comisión Nacional de Productividad -que debe entregar un informe al respecto a la Presidenta- la educación técnica que se imparte en Chile no satisface las necesidades actuales ni futuras del país. En particular indica que la formación en los liceos es la que presenta mayores deficiencias y propone aumentarla en dos años más como obligación, para que los jóvenes efectivamente se titulen en sus especialidades antes de egresar. Actualmente un 40% de esos estudiantes nunca se certifica; otro 40% nunca sigue estudios superiores y solamente el 20% se desempeña laboralmente en aquello que estudió, cifras complejas si se considera que casi el 70% de los alumnos de los Liceos Técnicos Profesionales (LTP) proviene de familias vulnerables.
Para la Comisión es fundamental privilegiar el vínculo de los liceos con los centros de educación superior y con las empresas, de tal manera de mejorar la calidad de la formación y el acceso al mundo laboral.
Estos temas se encuentran incorporados en la Estrategia Nacional de Formación Técnico-Profesional 2017-2022, que el gobierno está implementando y que en Los Ríos se traducirá en la apertura de un CFT estatal y gratuito en La Unión, desde el año 2019.
En este contexto y mientras esas políticas avanzan, resultan muy relevantes los convenios firmados por las municipalidades de Lanco y Valdivia con Santo Tomás, para facilitar la continuidad de estudios superiores de jóvenes de algunos LTP, en el Centro de Formación Técnica. También las iniciativas de entidades privadas por permitir la capacitación dual en aquellas áreas de la economía local, que más personal calificado requieren. Sin duda esa es la dirección acertada.