Ayer comenzó el sistema de admisión escolar en las regiones de Los Lagos, Tarapacá, Coquimbo y O'Higgins, las cuales se suman a la experiencia ya realizada en Magallanes en 2016. El próximo año será el turno de Los Ríos y las demás zonas que faltan por incorporar a esta nueva forma de postulación a los colegios que reciben aporte estatal (municipal, subvencionado, administración delegada).
La modalidad es parte de la Reforma Educacional que se encuentra en marcha en el país y que a través de la Ley de Inclusión Escolar establece el fin a la selección en los establecimientos, como una forma de terminar con la discriminación que implicaban -a juicio de los impulsores de la norma- las antiguas postulaciones, entrega de antecedentes, entrevistas personales y otros procedimientos. También se busca terminar con las filas de padres acampando fuera de un colegio para acceder a un cupo, como se vio en varias ciudades hace pocos meses.
Ahora, el apoderado postula a todos los colegios de su preferencia a través de una plataforma web (www.sistemadeadmisionescolar.cl) y espera que el sistema seleccione, de acuerdo a las vacantes disponibles y considerando la variable de un hermano ya estudiando en el mismo lugar. Luego de ello, si la familia acepta la elección, concreta la matrícula respectiva. Si no, puede reintentar.
En esta ocasión las postulaciones on line se hicieron para pre kínder, kínder, primero básico, séptimo básico y primero medio; pero a futuro, la idea es que sea la única forma de acceder a cualquier curso.
Aunque todavía falta para que sea el turno de esta región, es muy importante que los apoderados locales comiencen a informarse y que las autoridades también socialicen el proceso, para que las dudas (y los mitos tejidos) se aclaren oportunamente.
Además, sería interesante responder algunas dudas sobre el funcionamiento de las normas. Especialmente llama la atención que aún persista la discriminación por sexo/género en algunos colegios públicos solo para niños y otros solamente para niñas. Esa diferenciación debería desaparecer, si la meta es lograr una completa inclusión, en igualdad de condiciones, para todos y todas las estudiantes.