Valeria Barahona
Pasada la emoción de los resultados de las votaciones, en las que la candidata presidencial del Frente Amplio (FA), Beatriz Sánchez, obtuvo un imprevisto 20,26% de apoyo, la coalición de izquierda concentró las discusiones internas en un asunto muy de fondo: a quién respaldará en segunda vuelta. Es un hecho que el electorado del Frente Amplio tiene la llave para decidir quién será el próximo Presidente.
"Beatriz fue muy clara ayer: Piñera es un retroceso en todos los términos, pero no tiene sentido pensar en una suerte de co-gobierno (con el sector que apoya a Alejandro Guillier)", afirmó el diputado reelecto por la Región de Magallanes Gabriel Boric. La coalición formada por los otrora líderes del movimiento estudiantil declaró el comienzo de un "proceso de reflexión", cuya primera reunión terminó sin declaraciones a la prensa.
"Tenemos diferencias sustantivas con ambos (Piñera y Guillier); sabemos que no son lo mismo", afirmó ayer Boric, quien también es líder del Movimiento Autonomista (una de las formaciones del Frente Amplio), en conversación con radio Cooperativa.
"Tenemos diferencias sustantivas con la Nueva Mayoría como para empezar a negociar cargos. Esto lo señaló Beatriz y la mayoría de los movimientos que conforman el Frente Amplio. Como no pasamos a segunda vuelta, pese a la buena votación, vamos a hacer una oposición responsable de cualquiera que sea el Gobierno que venga", agregó Boric.
dudas programáticas
Sobre si ahora se debe ceder los votos del Frente Ampolio a Alejandro Guillier, el mismo parlamentario dijo que "para nosotros lo importante es que haya señales de avanzar en determinada dirección", ya que "hemos tenido diferencias sustantivas con la Nueva Mayoría".
Guillier "no tenía muchas definiciones en los temas sensibles que han instalado los movimientos sociales en los últimos 10 años. Si ellos se mantienen en lo mismo, la responsabilidad de que Piñera se transforme en Presidente no será nuestra, será de ellos", agregó Sharp.