Correo
La moral de Morales
El 24 de febrero de 2016 el pueblo boliviano rechazó la idea de Evo Morales de acceder a la Presidencia por cuarta vez de manera consecutiva, referéndum que fue ratificado por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Bolivia. La opción del "No" reunió un 51,31 por ciento de los votos contra el 48,69 del "Sí". Pero los partidarios de Morales desconocieron el resultado de dicho plebiscito y ahora el nuevo Tribunal Constitucional de Bolivia, nombrado por Evo Morales, decidió por unanimidad, cambiar los resultados del plebiscito.Este nuevo golpe a la democracia, que desafía el Estado de Derecho, demuestra que Evo Morales es el alumno más aventajado de Nicolás Maduro en Latino América.
Lo gracioso de este caso es que a Evo Morales le encanta darle a Chile lecciones de democracia y de respeto a los tratados internacionales.
Mauricio Pilleux Dresdner mpilleux@telsur.cl
Pasto largo
En relación al problema del pasto largo en los espacios públicos, llama la atención que un servicio que tiene demanda estacional, pero totalmente predecible, no encuentre una solución técnica por parte del municipio. ¿No es acaso este problema similar a la recolección de basura en la costa, durante el verano, o la atención por enfermedades respiratorias en invierno? Nuestro municipio enfrenta esas y quizás muchas otras necesidades que requieren un servicio variable a lo largo del año, espero que el tema del pasto sea la excepción y no la regla en relación a su manejo.
Juan Pablo Salazar jpsalazar@telsur.cl
Nuestro cerebro
Sabemos que nuestro cerebro es el órgano donde se generan nuestras ideas y pensamientos dice T.J. Teyler, (1994) Profesor de Neurobiología en Northeastern Ohio University, EE.UU.
Joaquín Grau (1928-2014), periodista y parapsicólogo español asiente que éste se divide en dos mitades o "hemisferios". Uno, derecho, es emocional, espacial, intuitivo, no tiene leyes ni reglas; puede moverse por el espacio como un vehículo en el desierto sin dirección pues todo es "carretera"; es lúdico e imaginativo como el de un niño, donde sueño y realidad se acercan; es mágico, metafísico, centro del espíritu universal, espacial, musical, lugar de las humanidades y ciencias sociales. El izquierdo, nos define como especie, pero también el que reacciona como chicharra frente a las palabras; es razonador, calculador, y argumentativo; se mueve en una sola dirección controlado por el tiempo; diseña ciudades. Es analítico, verbal, planificador, y verificador.
Si miramos al mundo moderno, altamente tecnificado hoy, nos quedamos perplejos con la internet, celulares, misiles y ruidos de guerra. Posiblemente, las computadoras, productos del hemisferio izquierdo, ya han ensayado todas las batallas posibles. Son ingenios superiores a un millón de cerebros humanos unidos, postula Grau. Pero, ciertamente, que se trata un millón de "cerebros enfermos" que nos controlan.
Omer Silva Villena osilvavilleqgmail.com
Simplificar el mapa electoral
La legitimidad del nuevo sistema electoral se encuentra cuestionada, al igual que lo estuvo el binominal. Por un lado existen ganadores que acumulan menos votos que perdedores, y por otro lado, la explosión de candidatos (por ejemplo, de 470 a 960 en el caso de los diputados), hizo imposible un debate político serio. Peor aún, el sistema fomenta el multipartidismo en un sistema presidencial.
Sólo un país ha logrado mantener un sistema presidencial multipartidista por más de 25 años: Chile entre 1933 y 1973, y sabemos cómo terminó aquello. Dada nuestra historia de presidencialismo, proponemos cambiar a un sistema mayoritario, ya que es simple y fomenta la creación de coaliciones, generando legitimidad y gobernabilidad. Como ya existe experiencia utilizando este sistema en elecciones de alcalde y presidente, para implementarlo en diputados y senadores bastaría con simplificar el mapa electoral (un distrito cada tres comunas y una circunscripción cada tres distritos).
Álvaro Bellolio, Florencia Serra y Gonzalo Valdés. Investigadores adjuntos UAB
Prioridades y veracidad
En temporada de ofertones y pujas electorales, resulta fundamental que se presione a los candidatos respecto de sus prioridades. Podemos creer en sus buenas intenciones en cuanto a nuestra salud, vejez, educación y libertad, pero los recursos del país, como los de todos nosotros, son limitados. Y esto vale no solo para los dos candidatos aún en carrera, sino también para quienes pretenden cambios de régimen más radicales. Ya que es falso que siempre se pueda cumplir con todos los buenos deseos, pues no siempre se puede responder "lo uno no quita lo otro", ¿cuáles son sus prioridades? Sin preocupación mínima por un hablar veraz, la clase política no recuperará su credibilidad. Y en política, el declarar prioridades (con su contraparte: confesar a qué se renuncia) es parte fundamental de la veracidad.
Manfred Svensson Instituto de Filosofía. U. Andes