Experto asegura que una ley de participación no garantizaría incidencia en políticas públicas
FACTORES. El director del CER-Uach, Egon Montecinos, apuntó a tres condiciones para que dirigentes y sociedad civil influyan en las decisiones.
Actualmente existe en Chile un modelo de participación ciudadana que es representativista, conservador y que actúa bajo la Ley 20.500, que es una norma indicativa. Mientras que la elite dirigencial aspira a un modelo inclusivo, vinculante y más participativo, por lo tanto existe una brecha, según plantea Egon Montecinos, director del Centro de Estudios Regionales y del Desarrollo Territorial de la Universidad Austral de Chile (CER-Uach). En los últimos tres años -sostuvo- se ha acrecentado ese anhelo de los dirigentes, quienes han observado en la práctica las limitaciones de la normativa y, en ese contexto, piden modificaciones a la ley.
¿Una ley asegurará una participación vinculante? El doctor en Ciencia Política afirmó que una ley no es una variable interviniente fundamental para propiciar espacios de decisión donde la ciudadanía pueda influir, así -dijo- lo demuestran experiencias exitosas en participación ciudadana en Argentina, Brasil, Uruguay, Chile, Perú, República Dominicana y Colombia. En ese contexto, Montecinos propone una participación incidente.
"Lo incidente significa influir en una política pública. Por ejemplo, cuando se quería crear la región de Los Ríos no había ninguna ley que le diera el carácter de vinculante al plebiscito que se hizo en Osorno y en Purranque, pero fue una participación tan masiva y fuerte que incidió en la decisión de los senadores de dejar fuera a Osorno", explicó.
"Pero eso no está determinado por tener una ley, que ésta ayuda sí ayuda, pero concentrarse en que incidir en una política o en un presupuesto va a estar determinado por una ley creo que es instrumental", añadió.
Otro ejemplo de participación incidente es Villa Alemana, un municipio que -indicó- tiene un récord mundial en participación ciudadana en el presupuesto participativo. "Participa más gente para decidir $300 millones que en la elección de alcaldes y concejales", precisó.
Tres factores
Para que un dirigente o una sociedad incida o influya en políticas públicas tienen que existir al menos tres condiciones, según Montecinos.
La primera, dirigentes empoderados, informados y capacitados, "de modo que sea muy difícil hacer clientelismo político con los dirigentes", subrayó y añadió que "en Los Ríos hay dirigentes muy empoderados y que tienen mucha capacidad de incidir, pero no explotan esa capacidad, porque tienen una valoración muy alta de las autoridades, confían mucho en éstas y eso no permite generar un contrapeso a las autoridades".
Segunda, la voluntad política. Señaló que es clave tener autoridades que quieran compartir el poder de decisión. "Una ley que obliga a una autoridad a ello ayuda. Pero qué pasa en República Dominicana, por ejemplo, la ley dice que podrán decidir los municipios mediante presupuestos participativos hasta el 40% del presupuesto de inversión; sin embargo, los que no tienen vocación democrática proponen hasta el 0,5% y, por lo tanto, generan procesos de incidencia mínimos. En Perú la ley establece que para elaborar el presupuesto regional, el presidente regional está obligado a convocar un consejo local de planificación, pero las autoridades convocan a sus adherentes y a los opositores los dejan fuera".
Tercera, la formación ciudadana y la formación permanente de los dirigentes. El doctor en Ciencia Política planteó que "ya basta de capacitaciones en elaboración de proyectos" y enfatizó en que éstas deben centrarse en cómo se consigue o se construye el poder territorial y social.
Frente a estas condiciones, Egon Montecinos sostuvo que el rol del Estado es facilitar que se cumplan y no que se apodere de estos procesos. En esa tarea, destacó como relevante el trabajo que puedan realizar las universidades, "por eso desde el Centro de Estudios Regionales y del Desarrollo Territorial abordamos la formación ciudadana y vamos a seguir desarrollando escuelas de formación que no son ideológicas sino que tienen una mirada transversal".