Daniel Navarrete Alvear

Con la presentación de 11 montajes de pequeño formato, finalizó el sábado por la noche el 9° Festival de Danza Contemporánea Junto al Río. El cierre fue en el teatro municipal Lord Cochrane, escenario escogido para las galas y que fue solo uno de los lugares donde hubo actividades gratuitas.

Desde el viernes 17 de agosto, el evento también tuvo como punto de encuentro la Sala de Convenciones de la Municipalidad de Valdivia (para clases abiertas), el mall y la Costanera de la Ciencia (para intervenciones), el Museo de Arte Contemporáneo y Galería Réplica (para las proyecciones y conversatorios de Pewma Virtual, Danza 360°) y el Club Bimba (para montajes para público adulto). El festival fue realizado con recursos obtenidos del Fondart Regional y logró convocar a cerca de 2.000 espectadores.

"Nos llevamos una sorpresa muy grata en relación a la respuesta del público. En general tenemos la sensación de haber superado lo que logramos en la versión anterior del evento, porque funcionó muy bien eso de llevarle danza a la gente a lugares no tan habituales para el arte. Eso tiene que ver con nuestro compromiso permanente con la formación de audiencias, aunque también sabemos que un festival correctamente bien armado, necesariamente tendrá una buena asistencia", dice Ximena Schaaf, directora de Junto al Río y de la Escuela de Danza Valdivia, responsable de la iniciativa.

La diferencia

El programa del evento fue articulado a través de una convocatoria abierta y orientado principalmente a los montajes de gran formato. Es decir, aquellos de una duración promedio por sobre la media hora. En este segmento fueron postuladas 24 propuestas y se escogieron 8, lo mismo que en la categoría de pequeño formato con la que finalizó el encuentro el fin de semana.

"Puede ser que al menos hasta hace una década, la gente no sabía mucho de danza contemporánea, por lo que asumimos la responsabilidad de incorporar ese lenguaje a nuestras propuestas. Ahora, con ese atractivo instalado, lo que nos mueve es descubrir cosas nuevas y subir la vara en relación a la calidad de montaje que escogemos para cada año", explica Schaaf.

Junto al Río tuvo sobre las tablas del Cochrane a elencos de Santiago, Concepción, Puerto Montt, Temuco, Curicó y Valparaíso, entre otras ciudades; más Valdivia y las propuestas de Colectivo Tres ("Refracción, un tiempo en otro tiempo"), Compañía de Danza Fantasía ("Gravitantes"), la Compañía Ballet Municipal de Cámara ("Nijinsky") y Mad House ("Índice: el juego verdadero").

Evaluación

El coreógrafo Ricardo Uribe fue responsable de "Gravitantes" y "Nijinsky". Participó además en la curatoría del festival, evaluando a los postulantes.

"Recibimos piezas de muy alto nivel y también otras horribles, que tal vez no fueron pensadas para el sentido que tiene la jornada que es precisamente profesional. Esta es una plataforma que nos permite ver lo más reciente de la producción de danza contemporánea y que funciona también como oportunidad para ir viendo los nuevos temas que surgen cada año. En ese sentido, creo que a muchos cuerpos de baile aún les falta salirse de su zona de confort. Algunos aún no dejan de lado lo que les acomoda, asumiendo con eso otro tipo de riesgos en la creación", indica. Y agrega: "Es complejo hacer una obra que satisfaga a todos los involucrados, siendo que además hay que ponerse en el lugar del público y hacer el trabajo lo suficientemente interesante para que no se queden dormidos a mitad de la función o simplemente dejen la sala. Aunque hemos avanzado mucho en nuestra relación con la audiencia, creo que al menos el 40% de quienes asisten a una presentación, son los que realmente están familiarizados con el lenguaje que les proponemos y logran entenderlo".

Junto con su propio trabajo en "Nijinsky" (donde homenajeó al célebre bailarín ruso), Uribe también escogió como los mejores aciertos de Junto al Río a "Guachoperro" de Joel Inzunza &Cia en coproducción con el centro cultural Matucana 100 y a "...Y escaparon del peso de la oscuridad" del colectivo Escénica en Movimiento.

Plataforma

A siete años de su debut y luego de un 2017 en que tuvieron espacio en pequeño formato, Mad House decidió cambiar de categoría y logró un cupo en la de larga duración. "Como intérprete he estados en versiones anteriores del festival, sin embargo este año el salto estuvo en la innovación, ya que mostramos la primera obra de danza contemporánea hip hop, musicalizada con beat box, y que fue producto de un extenso proceso de investigación coreográfica. Nos parece que este encuentro es una plataforma muy importante, no solo para mostrar nuestro trabajo, sino que para relacionarnos con otros profesionales que están en lo mismo", dijo Diego Álvarez, director de la compañía de danzas urbanas y director general del montaje en cuya elaboración contó con la ayuda del coreógrafo y bailarín Ignacio Díaz.