Tratamiento del cáncer
Recientemente se conoció un cambio radical que hay que reconocerle a Fonasa y que nos lleva bastante adelante en términos de lo que recibíamos hasta ahora. Se logró plasmar una idea clara de cobertura de la patología oncológica en Fonasa, que ha recogido una modernización de los conceptos de riesgo y de costos en cuanto a una nueva manera de pagar las acciones médicas en el área de oncología, lo que debiera significar que los pacientes tengan la posibilidad real de obtener un tratamiento adecuado en el sistema público de este país.
Específicamente, se consiguió que alrededor de 90 tipos de tratamientos empiecen a estar incorporados a las canastas del Programa de Prestaciones Valoradas (PPV), lo que le da la opción técnica al médico de poder elegir el tratamiento adecuado para cada paciente dentro de un abanico de posibilidades.
Esto es una reforma casi por decreto porque indudablemente va a significar que los pacientes van a tener el derecho real de recibir el tratamiento que debieran. Esto, sin duda, va a presionar al sistema porque se va a notar la ausencia de entrenamiento en oncología que tiene el profesional médico formado en las universidades chilenas y, segundo, evidenciará la carencia de recursos humanos en oncología, tanto a nivel médico como de profesionales paramédicos. Sin embargo, requiere de una puesta en marcha ordenada, que aún no se ha visto y nos puede enfrentar a un nuevo Transantiago si se hace mal.
El Minsal es responsable de que la idea técnica desarrollada llegue a ser la solución largamente esperada para las más de 50.000 personas que son diagnosticadas de cáncer cada año.
Por otro lado, se requerirá modificaciones de la malla curricular en las carreras de la salud, actualmente desfasadas de la realidad; de las estructuras de contratos en el sistema público y, subsecuentemente, eso debería llegar en algún momento a mejorar la eficiencia del sistema privado.
Dr. Francisco Javier Orlandi Oncólogo Universidad de Chile
Unasur
Unasur lleva tres años paralizada, producto del fracaso derivado de su "exceso de ideologismo". El organismo fue creado para fortalecer el diálogo político entre Estados. No obstante, su incapacidad para hacer frente a la crisis venezolana fue uno de sus mayores errores que pudo haberse cometido. Es por esto que, hoy es factible plantearse, ¿qué tanto sirve una institución que no cumplió con su cometido?
Varios países, incluido Chile, ya habían congelado su participación en Unasur, por lo que promover su término no supone en realidad ninguna pérdida para la región, y en cambio abre una oportunidad para reforzar instituciones que sí constituyan un verdadero aporte para la paz de américa.
Cabe recordar, los ejemplos de la liga de las naciones que fracasó en su intento de conservar la paz en la primera guerra mundial antecediendo a la ONU, o el caso más reciente de Grupo de Río, el cual se adaptó en 2010, para formar La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños más conocida como Celac.
Los cambios en las instituciones internacionales o internas no son malos, siempre y cuando sean correspondientes a cambios sociales que promuevan su transformación.
Valentina Ramírez vramirezh85@gmail.com
Regreso a clases
El retorno a la rutina suele ser una preocupación familiar que atormenta a los padres. La tarea puede ser titánica si no logramos al menos adecuarnos a los nuevos horarios y restricciones que el sistema escolar nos impone.
Para enfrentar de la mejor manera este momento, se sugiere que una semana antes del ingreso a clases, retomar progresivamente los nuevos horarios al menos para acostarse cada vez más temprano. Si bien, el calor puede ser un obstáculo para que los niños se vayan a dormir temprano, la idea central es organizar la rutina de tal manera que los juegos y las actividades disminuyan hacia finalizar el día, con explicitación de la necesidad de hacerlo. Es importante relatarles por qué hay que dormir o disminuir la actividad para tener más calma y disposición al sueño, para generar consciencia en los niños.
Otras estrategias pueden ser preparar en conjunto con los niños, los útiles y uniforme para incluirlos en la nueva etapa; conversar en familia de lo vivido en el año anterior, lo que se desee sin forzar y valorar los progresos, así como enfatizar en las posibilidades de mejorar o avanzar. Siempre es importante acompañar y contener a los niños en estas transiciones. Puede parecer una tarea de titanes, pero si se es sistemático y comprendemos que para todos, las transiciones son difíciles, de seguro seremos capaces de estar más atentos y generar estrategias variadas para superar los obstáculos.
Claudia Figueroa Académica Fonoaudiología Unab
Dolor azul
Bien Unión Calera, bien Palestino. Todo para mayor dolor de la "U".
Carlos A. Vargas P. cavarpe_55@hotmail.com