Daniel Navarrete Alvear
En el cementerio de Futrono fueron sepultados ayer los restos de Pedro Segundo Pedreros Ferreira. Se trata de uno de los 17 campesinos asesinados en un operativo militar el 9 de octubre de 1973 en el sector de Chihuío; y cuyas osamentas fueron identificadas recién en marzo pasado. El velorio se efectuó el sábado en Curriñe, en la Escuela Alonso de Ercilla y consideró un culto evangélico, además una ceremonia mapuche realizada por loncos de varias comunidades del sector.
Pedreros murió a los 48 años de edad. Se desempeñaba como empleado administrativo y mayordomo de montaña del Complejo Maderero y Forestal Panguipulli. Era viudo y tenía ocho hijos, los mismos que se volvieron a reunir junto a nietos, bisnietos, amigos y cercanos, para despedir sus restos.
Homenaje
En el funeral y a través de diversas intervenciones, fue reconstruida la historia de quien hace dos meses se volvió la 13° víctima en ser identificada en el llamado Caso Chihuío. En su momento, esta información fue entregada a los familiares por el ministro en visita Álvaro Mesa, lo que permitió planificar un funeral.
"Varias personas hablaron de la vida de mi papá y eso fue muy emotivo. Nos pudimos reunir entre quienes lo conocieron para encontrar consuelo. Pudimos enterrarlo después de 46 años y eso nos da algo de tranquilidad", dijo Luis Pedreros, hijo del difunto.
Claudia Sánchez, una de las nietas de Pedro Pedreros, también mostró su conformidad por el término de una incertidumbre que duró más de cuatro décadas. "Fue un funeral muy emotivo, depués de tantos años de espera al final podemos cerrar un ciclo en nuestras vidas y como familia. Es un consuelo, porque ya sabemos que está ahí, en el cementerio, descansando en paz".
Las otras víctimas
El Caso Chihuío también dejó como víctimas a Ricardo Segundo Ruíz Rodríguez (24), Rosendo Rebolledo Méndez (40), Narciso Segundo García Cancino (31), Juan Walter González Delgado (31), Luis Arnoldo Ferrada Sandoval (42), José Rosamel Cortés Díaz (35), Carlos Vicente Salinas Flores (21 años), José Orlando Barriga Soto (32 años), Manuel Jesús Sepúlveda Rebolledo (28), Eliecer Sigisfredo Freire Caamaño (20 años), Daniel Méndez Méndez (42), Rubén Vargas Quezada (56), Carlos Maximiliano Acuña Inostroza (46 años), Neftalí Rubén Durán Zúñiga (22), Sebastián Mora Osses (47) y Fernando Adrián Mora Gutiérrez (17). Todos eran parte del sindicato Esperanza del Obrero del Complejo Agrícola y Forestal de Panguipulli.
Del caso hay una investigación judicial y también se ha dado cuenta en el libro "La misión era matar. El juicio a la caravana Pinochet-Arellano" (LOM Ediciones, 2000) de Jorge Escalante.