De acuerdo con los datos del Ministerio de Educación, de las 9 mil 256 postulaciones realizadas durante el proceso regular en la región de Los Ríos en 2018, 5 mil 495 (que representaron el 59%) pusieron en primera preferencia un establecimiento con más demanda que vacantes, lo que se traduce en que debieron competir por un cupo a través del algoritmo del Sistema de Admisión Escolar (SAE).
De esas 5 mil 495 postulaciones, sólo 2 mil 772, esto es, el 50%, lograron acceder a un cupo en su primera preferencia. Además, a nivel nacional, de los postulantes pertenecientes al 1% de mejor rendimiento que postularon a colegios con sobredemanda, sólo un 34% quedó en su primera preferencia.
Éste fue uno de los temas centrales de las dos reuniones con apoderados y estudiantes organizadas por la Seremía de Educación para analizar el tema de la Admisión Justa.
Proyecto de ley
Estas actividades se dieron en el contexto de la decisiva jornada de hoy cuando la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados decidirá por votación si admite o rechaza la idea de legislar el proyecto de ley que permite la selección por mérito en liceos de alta exigencia (ver columna) .
Al respecto el intendente César Asenjo expresó que "desde nuestro gobierno estamos apoyando la difusión y el diálogo abierto respecto al proyecto Admisión Justa, porque queremos hacer políticas escuchando a nuestra gente, teniendo siempre el foco en avanzar hacia una educación más justa, equitativa y que reconozca el mérito individual de nuestros estudiantes".
Apoderados
En la primera reunión, los padres y apoderados manifestaron su malestar por no contar con la posibilidad de elegir el establecimiento para sus hijos, y la inquietud por el futuro académico de éstos.
Para Javiera Maturana, apoderada y presidenta del Centro de Padres de la Escuela El Laurel, de Valdivia, "el sistema de admisión actual nos quita la libertad de elegir dónde quieren estudiar los jóvenes. No es correcto que a partir de una tómbola se defina el establecimiento. La idea es que junto con la inclusión, todos podamos postular al colegio que más queramos para nuestros hijos".
Junto con sostener lo manifestado por Maturana, la asistente de sala Patricia Barrera subrayó que frente al panorama que les ofrece el SAE, "los niños han asumido, lamentablemente, que no tienen poder de elección. Aunque se les dice que pueden elegir cuatro colegios al momento de postular, la verdad es que no se quedan en el que más les gusta. Con el sistema que propone el actual gobierno, se premiará al niño que se esforzó durante el años anteriores, teniendo la posibilidad de quedar en el colegio que más le guste".
Estudiantes
En el desayuno que sostuvo el seremi Tomás Mandiola en la Escuela España, un grupo de alumnos de octavo básico le manifestó una serie de aprensiones relativas al SAE. Para Diego Martínez, el sistema actual le impedirá "entrar a un colegio específico, de buen rendimiento y prestigio. No sé cómo podré hacerlo. Creo que debería premiarse el esfuerzo, el hecho de haber tenido buen desempeño en básica".
En la misma línea, Benjamín Jara apuntó a que "en la actualidad, estaré forzado a no poder seguir lo que quiero, porque el sistema decidirá por mí. Pienso que si se tomara más en cuenta las calificaciones de cada alumno, sería bueno tanto para los que nos esforzamos, como para motivar a otros estudiantes a ser mejores"
En opinión de la directora de la Escuela España, Viviana Orellana, "el SAE atenta contra la libertad de los padres de poder elegir el establecimiento en el que quieren matricular a sus hijos y frustra su deseo de tener un mejor futuro".
Valorar esfuerzo
Finalmente, en la Escuela El Laurel, la alumna de octavo básico Noemí Fuentealba contó con resignación que "con el sistema de admisión que tenemos hoy, de nada sirve el esfuerzo que pongo en estudiar y sacarme buenas notas, porque es muy probable que no quede en el colegio que yo quiero".
Asimismo, su compañero Guillermo Silva enfatizó que "es triste saber que por mucho que uno saque buenas calificaciones, yo no puedo decidir irme -por ejemplo- al Liceo Bicentenario para después sacar una carrera profesional".