Oscar Gallardo Ríos

Primero La Unión, luego Río Bueno y ahora Paillaco. En las tres comunas donde partió la primera etapa del proceso de Consulta Indígena en la región de Los Ríos, las comunidades mapuches han manifestado sin matices su rechazo a la iniciativa del Gobierno, que está a cargo del Ministerio de Desarrollo Social.

En Paillaco, por ejemplo, mientras la Asociación Indígena Paillaco Futa Trawun rechazó categóricamente el proceso desde un principio, otro grupo de comunidades participó en los talleres y posteriormente manifestaron que se restarán de la Consulta Indígena.

Así lo explicó María Calvío, dirigenta de la comunidad José Calvío. "Asistí al taller para tener una idea general de lo que estaban haciendo en la Consulta Indígena. Sin embargo, rechazo este procedimiento de modificación de la ley. Junto a mi comunidad José Calvío decimos no a la Consulta Indígena.", comentó. También rechazan el proceso las comunidades Antiñir Ormero, Luminado Chapuco, José Santos Curimilla, Aguas Negras y La Luma.

¿Cuáles son las razones del rechazo a la iniciativa? La presidenta de la Asociación Indígena Paillaco Futa Trawun, Verónica Henríquez, comenta que "la rechazamos porque los principios de buena fe no se han cumplido. La consulta no ha sido informada. Estamos totalmente en desacuerdo con los cambios sugeridos para (la administración de) las tierras. Los mapuches no estamos no estamos interesados en vender ni arrendar nuestras tierras".

"Es como una usurpación de cuello y corbata para los pocos lamgenes que tienen tierras. Además, como la consulta no se realizó en la ruka (de Paillaco) terminaron dividiéndonos y la gente fue a una reunión y firmó sin saber de qué se trataba porque no se lo informaron antes", agregó la dirigenta.

Río bueno y la unión

Opinión similar manifestó uno de los lonkos del Consejo Comunal de Río Bueno, Luis Huaiquimilla, quien argumentó que el proceso "se rechaza porque nos dimos cuenta de que la consulta iba orientada a enajenar a través de los arriendos, las tierras mapuches".

"Las propuestas asociadas a estas modificaciones van orientadas a cambiar la figura de la protección de las tierras, como bajar de 25 a 5 los años para enajenar las tierras, aumentar a 25 años los periodos de arriendo o dar la posibilidad de poder subdividir estos terrenos. En definitiva, las propuestas están orientadas a permitir que las tierras mapuches entren al mercado y eso para nosotros es inconversable, porque la protección de las tierras indígenas ha sido un tema de constante preocupación por nuestro pueblo", agregó.

El dirigente enfatizó que de concretarse estas modificaciones a la ley 19.253 "las tierras indígenas pasarían a ser arrendadas especialmente por especuladores del mundo empresarial para poder abrir las tierras indígenas a ser intervenidas con proyectos inmobiliarios, por ejemplo. Esto vulnera lo que siempre hemos luchado: que nuestras tierras no puedan ser intervenidas, que no se puedan arrendar ni vender. Es lo poco que nos queda y hay que seguir recuperando todos esos títulos de merced que fueron violentados y usurpados".

Huaiquimilla igualmente subrayó que "yo creo que el gobierno quería reunirnos, sacar las firmas y decir que hizo la consulta. Deben entender las autoridades que no somos unos ignorantes, que tenemos mucha gente profesional y que sabemos leer entre líneas lo que están tratando de hacer".

En tanto, el presidente del Consejo Comunal Mapuche de La Unión, Marco González, manifestó que "hoy se puede arrendar hasta cinco años y lo quieren ampliar a 25. Algunos comuneros arriendan su tierra porque son ancianos y ya no la pueden trabajar, pero se la arriendan a sus mismos vecinos para sembrar, por ejemplo".

"En un arriendo de cinco años, una empresa grande no puede invertir porque en ese periodo no va a tener producción. Por lo tanto, lo quieren subir a 25 años, y ¿qué va a suceder? Van a arrendar un terreno en el monte, van a botar todo el bosque nativo y nos van a llenar de eucaliptos. En 25 años pueden sacar dos y hasta tres cosechas y después se van a ir y nos van a dejar depredado el monte. Lo mismo va a pasar con terrenos a la orilla de un río, donde podrían instalar pisciculturas por ejemplo. Eso para nosotros es muy grave", agregó.

Seremi

Consultado por el rechazo a la consulta, el seremi de Desarrollo Social, Carlos Rolack, señaló que " por ejemplo, hoy en Lago Ranco nos encontramos con algunos dirigentes que rechazaron la consulta y otros que nos pidieron que les hiciéramos la presentación. Son situaciones que se van a dar en todos lados, pero están rechazando la propuesta sin conocer las medidas que se están proponiendo modificar. Lo peor que puede pasar es que no se establezca el diálogo. Hay mucha desinformación".

Sobre el rechazo a ampliar los plazos de arriendo, dijo que "les estamos preguntando si quieren que el arriendo se amplíe y ellos pueden decir si están de acuerdo o no. Si están de acuerdo en la modificación, ellos podrán decidir si quieren arrendar o no sus tierras".