Según antecedentes del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Unicef, si los niños o niñas menores de cinco años fueran alimentados con leche materna exclusiva durante los primeros seis meses de su vida, se podrían evitar 1.4 millones de muertes a nivel mundial.
La lactancia materna es, sin duda, la forma de alimentación que contribuye con mayor efectividad al desarrollo físico, intelectual y psicosocial del niño o niña, proporcionándole nutrientes en calidad y cantidad adecuados para el crecimiento y desarrollo de su organismo. Se ha observado que los menores que se amamantan son más activos, presentan un mejor desarrollo psicomotor, una mejor capacidad de aprendizaje y menos trastornos del lenguaje.
El amamantamiento, especialmente si se inicia inmediatamente después del parto, produce un reconocimiento mutuo entre la madre e hijo, estableciéndose entre ellos un fuerte lazo afectivo o apego. Existe evidencia científica que refuerza la idea de promover la lactancia natural para favorecer el apego en el desarrollo del ser humano.
Según datos de la Encuesta Nacional de Lactancia realizada en nuestro país el año 2000, existe un menor riesgo de mal nutrición, ya sea por déficit o exceso, entre los niños amamantados en forma exclusiva los primeros seis meses de vida, que aquéllos que recibieron lactancia mixta y artificial. Para el Ministerio de Salud es entonces prioritario llegar a coberturas de 60% de lactancia materna exclusiva a los seis meses, meta que resulta muy variable en las diferentes regiones de nuestro país, pues depende de factores culturales, maternos, socioeconómicos, laborales y factores propios de los recién nacidos y nacidas. Es por tanto, un gran desafío para los y las profesionales de la salud promover el amamantamiento y prevenir estado de salud vulnerables, con un incremento en las consultas médicas y el mal progreso en la relación peso - talla.
Hoy Chile cuenta con una legislación que protege la infancia y la maternidad. Podemos mencionar el descanso postnatal ampliado, el derecho de la mujer trabajadora para dar alimento a su hija o hijo que asiste a una sala cuna, un sistema de protección social a la primera infancia - Chile Crece Contigo - implementado a partir del año 2007, que sin duda han contribuido a promover, fomentar y prolongar la lactancia materna en la población infantil. Si bien estas medidas han apuntado en dirección correcta, es imperativo continuar el compromiso a través de políticas públicas que favorezcan la socialización de los numerosos beneficios de la lactancia materna.