Representación femenina en el Core
Solo siete son las candidatas que van por el Consejo Regional de Los Ríos, entre 69 postulantes a catorce cargos.
La mayoría de los movimientos vecinales, sociales, estudiantiles y comunitarios se encuentra liderados por mujeres. Sin embargo, muy pocas de ellas se convierten en candidatas para puestos de elección popular, desde los cuales se podrían hacer los cambios que los manifestantes piden en las calles con sus protestas, o a través de las redes sociales.
Un ejemplo de esto son las listas para la primera elección democrática de Consejeros Regionales, donde escasamente aparecen nombres femeninos, en medio de una gran cantidad de opciones de hombres.
La región de Los Ríos no es una excepción a esta regla. Entre 69 candidatos para el Consejo, solo hay siete mujeres y las probabilidades de que ellas lleguen a uno de los catorce puestos en disputa se hacen pocas, debido -entre otros factores- a la baja visibilidad que sus campañas tienen respecto de sus compañeros de lista.
Este fue uno de los temas abordados ayer durante la realización del Foro "Mujer Trabajo y Salud", organizado por iniciativa de la periodista Lilian Vidal Asenjo en el auditorio de Diario Austral y al cual asistieron Maribel Moreno, Ángela Sabat, Paola Peña y Romina Altamirano, para responder consultas y compartir opiniones respecto del rol de los Cores y de sus propuestas en caso de ser electas.
Pese a sus diferentes posturas políticas, todas coincidieron en los desafíos de las campañas, en la inquietud por las pocas atribuciones que efectivamente el Core puede desarrollar, pero también en la necesidad de trabajar para lograr una efectiva participación ciudadana en la toma de decisiones, área que el Consejo sí debe resguardar y que hoy no se encuentra debidamente respetada.
Esa inquietud por la inclusión es un tema compartido transversalmente, que esperan poder desarrollar.
Sin embargo, la realidad electoral que ellas enfrentan plantea el riesgo de bajar la ya mínima presencia (3 de 14 consejeros actuales) de mujeres en el Core, lo cual dejaría con ninguna representación a un 52 % de la población regional y podría anular el aporte de mirada de género, que se debe poner en todas las decisiones políticas y de inversión pública locales. Por lo mismo, es necesario reflexionar sobre este tema.