La impotencia que se vive en la Universidad de Chile ayer tuvo una imagen. A los '62 Marco Antonio Figueroa ordenó la salida de Gustavo Lorenzetti y el ingreso de Bryan Cortés. El argentino llegó al banco llorando de molestia.

Sus lágrimas dejan claro que los azules no lo están pasando bien. Los dirigidos por el "Fantasma" cayeron ayer por 1 a 2 ante Cobresal, un equipo que hasta ahora no sumaba puntos. En cambio, los laicos registraron con ello su segunda derrota consecutiva, tras el revés sufrido el viernes ante Palestino y crecieron las dudas acerca de la continuidad del entrenador.

La "U" apostó durante todo el partido a la que ha sido su única fórmula de ataque durante el torneo de Clausura: el centro. Por esa vía pudo abrir la cuenta en varias oportunidades, particularmente en el primer tiempo, pero Sebastián Cuerdo tuvo atajadas notables ante los cabezazos de Juan Rodrigo Rojas y Paulo Magalhaes y un rebote cazado por Osvaldo González.

Los azules intentaban de la mano de la riqueza técnica de su nutrido plantel, pero chocaron constantemente con la bien parada defensa minera.

En el segundo tiempo el partido siguió con la misma tónica, aunque los acercamientos al pórtico local fueron mucho menos claros.

La apuesta permanente de Cobresal era esperar la oportunidad precisa para atacar. Y la opción llegó a los '72, cuando Lucas Parodi comandó la ofensiva y alargó para el buen Johan Fuentes, que a punta de amagues y un rebote llegó a las barbas de Johnny Herrera, a quien fusiló con un tiro alto para abrir la cuenta.

La "U" intentó reaccionar, pero carecía de las alternativas para vulnerar la defensa.

En eso estaban los universitarios cuando a los 83' Ever Cantero aprovechó un tiro largo y remató para marcar el segundo gol. El descuento de Rojas a los '88 no alcanzó para revertir la suerte de los capitalinos.

Tras dejar los camarines, los jugadores de los azules se echaron la culpa de su situación.

"(Figueroa) es un excelente técnico, que trabaja mucho, que entrega todo en la semana para que nosotros ganemos el fin de semana (...) El 90% de la responsabilidad es de los jugadores", comentó Herrera.

El capitán Pepe Rojas reconoció que "siempre que se pierde el ánimo no es de los mejores (...) Ahora hay que remontar, porque no podemos seguir en la misma senda".

El marcador fue uno de los más críticos con Figueroa, cuando la semana pasada fustigó el nivel del defensa central Matías Caruzzo, asegurando que él no solicitó su contratación, ya que ahora su prioridad era un volante mixto y un atacante. A los jugadores les desagradó que el DT despreciara el plantel que tiene, uno de los más numerosos y ricos del fútbol chileno.

El lateral Roberto Cereceda comentó que "cuando las cosas andan así, (los hinchas) gritan de todo. Uno está acostumbrado. Él ('Fantasma') ha estado en los dos lados".

Tras el término de esta fecha el fútbol nacional parará por dos semanas por el amistoso de la selección con Costa Rica.

Al regreso del receso, la "U" retomará el Clausura y el 30 jugará en el Estadio Nacional el partido de ida ante Guaraní, llave que definirá el cupo para la Copa Libertadores.

Para hoy se espera una reunión del directorio de Azul Azul, donde uno de los temas a definir es la situación del entrenador. Entre sus miembros hay molestia por las críticas y por el rendimiento del equipo.

Uno de los jugadores más regulares de la "U" desde el 2013 es Isaac Díaz. Ayer ingresó en el segundo tiempo por Sebastián Martínez. Para el centrodelantero, los "12 días de receso vienen bien para dar vuelta la página luego", añadiendo que deben mejorar el finiquito. Roberto Cereceda recordó que va la tercera fecha del campeonato, por lo "esto recién está comenzando todo. Es cosa que nos pongamos las pilas y corramos un poquito más", añadió. En la "U" esperan la incorporación del delantero Rodrigo Mora, ex River Plate de Argentina.