Un conductor en estado de ebriedad se estrelló la madrugada de ayer contra el frontis del Banco Santander, ubicado en la esquina de las calles Arauco e Independencia, en el sector de los cajeros automáticos.

El violento impacto, registrado a las tres de la madrugada, despertó sobresaltados a los vecinos del céntrico sector e hizo creer a muchos que se trataba de un alunizaje y que delincuentes querían robar el dinero desde los dispensadores, no obstante nada de ello se ajustaba a la realidad.

Por lo mismo, al acudir los carabineros al lugar, comprobaron que sólo se trataba del impacto del automóvil, patente CPTR-45, que se había incrustado literalmente en el inmueble y que en su interior había un hombre en estado de ebriedad, que lo conducía.

El sujeto fue identificado como Ricardo Uribe Avilés, de 30 años, quien se estableció en Carabineros tenía 2,0 gramos de alcohol en su sangre, resultando sin lesiones.

Por circunstancias que ahora se investigan, el conductor perdió el control del vehículo al querer doblar, impactando de lleno al edificio bancario que resultó con daños en sus vidrios y parte de su estructura metálica. Incluso el letrero indicador de los nombres de las calles resultó perjudicado.

Los daños a la entidad bancaria fueron avaluados por una empresa aseguradora en cerca de 2 millones de pesos.

Una estadística de Carabineros en la Central de Comunicaciones (Cenco), revela que en la región, sólo entre los meses de enero y febrero de este año, han sido 137 los conductores sorprendidos en estado de ebriedad al volante.

Esta cifra se eleva precoupantemente en comparación a 2013, cuando en el mimso período había sólo 88 casoa.

La situación para el prefecto, coronel Juan Pablo Boetto, "es de conciencia de cada cual, ante las insistentes recomendaciones y controles que efectúa Carabineros, especialmente los fines de semana".