Juan Carlos Hernández G.

Con la participación de 25 empresas regionales fue presentado ayer en la Sala Paraninfo de la Universidad Austral, el proyecto que lideran profesionales de la Facultad de Ciencias Agrarias grama y que tiene como objetivo reforzar la elaboración de alimentos funcionales en la región.

Se trata del "Programa de Transferencia para Empresarios de la Industria Alimentaria de la Región de Los Ríos, basado en Nutrientes Críticos, Alimentos Funcionales e Indice Glicémico", el cual responde a una inversión de 55 millones de pesos, de los cuales el 49% es aportado por el Gobierno Regional a través del concurso regional de innovación y emprendimiento y la suma restante la aporta al Uach, a través de aportes valorizados.

Durante la presentación a la cual asistieron consejeros regionales, autoridades universitarias y empresarios participantes del proyecto, la coordinadora del programa Nimia Manquián, explicó que el objetivo es "fortalecer y transferir capacidades, relacionadas con el valor nutricional y valor funcional de las materias primas y productos de empresas del rubro alimentos procesados, para iniciar la producción de alimentos funcionales en la zona".

De esta manera y con los resultados esperados, "se contribuirá a incrementar la competitividad de 25 empresas de la región", agregó.

En este sentido, la profesional explicó que el programa busca la construcción de una red de fabricantes de alimentos funcionales, con una estructura jurídica que les permita postular a nuevos proyectos de desarrollo.

Al respecto, se trabaja con empresarios que no han tenido formación académica para la elaboración de alimentos, los cuales serán capacitados durante un año. En ese periodo se les reforzará los conocimientos que tienen respecto de los nutrientes de sus materias primas, el etiquetado nutricional de sus productos y sus características funcionales.

Esta labor formativa les permitirá -sin necesidad de recurrir a un laboratorio- construir sus propios certificados nutricionales, donde identificarán las materias primas utilizadas.

Nimia Manquián explicó que los alimentos funcionales son aquellos que cuentan con algún elemento beneficioso para la salud y citó el ejemplo de la Panadería Lehmann, la cual fabrica un "pan rojo" o "pan púrpura", con trigos ricos en antocianinas, que son "los antioxidantes más poderosos existentes en la naturaleza".

También ejemplificó con los productos que tienen como base carnes magras y agregó que "hay muchos elementos funcionales dando vuelta en el mercado, pero no está descrita su funcionalidad y queremos destacarla, para que el consumidor y el empresario aprendan del tema".

La docente, quien es jefa del Laboratorio de Fitoquímica del Instituto de Producción y Sanidad Vegetal de la Uach, agregó que "las funciones esperadas de un alimento son suministrar los nutrientes para la vida y tener propiedades organolépticas y/o socioculturales aceptadas por los consumidores".

Entonces, el alimento funcional es el que cumple con estas carcaterísticas y aporta además un beneficio para la salud.

A su turno Claudio Muñoz, encargado del Fondo de Innovación para la Competitividad del gobierno regional, destacó las potencialidades del proyecto y la posibilidad de articular a los empresarios que forman parte del proyecto y con cuyo trabajo se apuesta también a "mejorar la calidad de vida, un mayor desarrollo económico y crecimiento de nuestros territorios".

El personero agregó que la labor que se desarrolla junto a los 25 empresarios que son parte del programa sirve para fortalecer la política de innovación, ya que se apuesta a generar valores agregados, los que se suman a la calidad de los procesos productivos.

"Trabajar en una región modelo involucra desarrollar iniciativas piloto que generen cambios, que posicionen a la región de forma distinta y haga de cada uno de nosotros actores comprometidos con el territorio y la calidad de vida de cada una de las personas que lo habita", manifestó Claudio Muñoz.

Durante la presentación del programa entregaron su experiencia los empresarios Sandra Ramírez, de Alforfón Tesoro del Sur; y Patricio Sangmeister, de Alterfluss Valdivia.