Con tesón por sus tres alumnos renace la escuela de Mancera
Juan Vargas Oñate
Apesar del incendio que hace una semana destruyó todas sus instalaciones, la escuela particular subvencionada "Humberto Hernández Villegas" de Mancera, renace hoy con sus tres únicos alumnos y con el tesón de su equipo encargado, que dirige Sonia María Hernández.
El fuego reveló el aislamiento de la isla, las necesidades de la comunidad y también el drama social que han vivido los estudiantes antes de llegar al recinto. Dos de ellos (de 9 y 10 años) están protegidos por el Servicio Nacional de Menores (Sename), luego de ser víctimas de abuso sexual por parte del conviviente de su abuela.
El hecho fue denunciado el año pasado y los niños fueron entregados por el tribunal en custodia a la sostenedora, quien ahora es también su madre adoptiva, porque viven con ella en la isla.
Hoy los menores hallaron un refugio maternal en la escuela de Mancera, son el motivo inspirador para Sonia María Hernández, "para mantenerlos a mi lado como alumnos sin perder clases; y como hijos, en un hogar donde están seguros", sostuvo.
Ayer la escuela "Humberto Hernández Villegas" continuaba con sus clases, en un rincón de un inmueble particular, cedido a la sostenedora por una amiga.
Los tres alumnos no han faltado a clases y lucían felices, porque recibieron oportunamente también mobiliario, y útiles, incluso una mesa de comedor.
La sostenedora agradeció ayer el material enviado a la isla para poder continuar y limpiar la superficie devastada por el fuego, de parte del Daem, Departamentos Social y de Obras, de la Municipalidad de Corral.
Los niños, que además resultaron damnificados porque perdieron útiles y ropas con el efecto del fuego, también han recibido ayuda, aunque requieren de zapatos, números 35 y 36.
"Debo agradecer que ese día del incendio (11 de abril) llegaron hasta acá, las autoridades regionales para entregar su apoyo y conocer nuestra realidad, tanto de la escuela como de la comunidad isleña. También agradecer a las empresas salmoneras que enviaron gente para ayudarnos a que nuestras clases no se vieran interrumpidas", dijo la sostenedora.
La reducida comunidad escolar, sólo quiere volver algún día a ver reconstruida su escuela, y recuperar también el museo que mantenían con donaciones incluso de la Universidad Austral de Chile. Ese era su orgullo, pero el fuego destruyó muchas piezas históricas.
Las pérdidas ocasionadas por el incendio superan los cien millones de pesos, pero Sonia María Hernández -que no tenía seguros comprometidos- sólo piensa en volver a ver en pie la escuela con el nombre de su padre, como homenaje a una familia marinera, que además de tener vocación de educación, sabe de embarcaciones, mares y ríos.
"Me volveré a levantar porque sé que hay que gente que me va a apoyar. He sido una mujer que ha trabajado toda su vida en el voluntariado de Corral y de esta isla, sin pedir nada", afirma y señala que la escuela de Mancera fue fundada el 26 de febrero de 1998, como una forma de ayudar a niños que debían cruzar el río a Niebla, para asistir a clases.
"Han estudiado muchos jóvenes acá y hay nombres ilustres entre nuestros exalumnos que llegaron a la Universidad de Concepción y la Universidad Austral de Chile", recuerda con orgullo