García Márquez: nuestro Cervantes
Sin duda que una iniciativa en esta dirección es positiva para Los Ríos, que se encuentra en proceso de darse a sí misma un ordenamiento distinto...
...pero agrego que Gabriel García Márquez es nuestro Cervantes y Cien años de Soledad, nuestro Quijote.
Pensando en García Márquez?Recuerdo que el año 1967 mi amiga Eugenia, que en ese tiempo era ayudante de Literatura Hispanoamericana y estaba al día en todo, llegó literalmente corriendo y en estado de euforia gritándome ¡Iván, Iván, se acaba de publicar Cien años de soledad!... Yo dije, Ah qué bueno, porque todavía era estudiante y no había llegado a ese nivel. Pero, como tenía que hacer un viaje largo (en tren), fui a la Biblioteca a buscar un libro que me durara para el viaje de ida y vuelta y me acordé de Cien años de soledad.
Me duró apenas para la ida? Con el título de la novela tintineando en mi mente, leí sin parar, entrando en un mundo mágico, pero tan verosímil y bien contado, que al día siguiente pensé en leerla de inmediato, pero no pude: tenía toda la novela en la memoria, y hasta el día de hoy la tengo.
Su estilo irrepetible, el comienzo inesperado que prepara al lector para adaptarse a todo lo nuevo que se abalanza sobre sus sentidos y su inteligencia, el narrador escondido entre ese mundo de seres, tiempos, niveles increíbles, la nitidez de la descripción de ese mundo fabuloso; Macondo, la invención de personajes que no tienen par, Remedios la bella, el gitano Melquíades, Amaranta, Úrsula, Aureliano Buendía, la cándida Eréndira, los acontecimientos inenarrables, el final sin parangón, la hacen la máxima representación de la América que somos y no somos.
Sus personajes siguen dando vuelta entre los seres que pueblan mi mente y se mezclan con otros, tal vez con los únicos que están a su altura, los del Quijote de la Mancha, el noble hidalgo enloquecido de bondad y fantasía, el ingenuo y servicial Sancho Panza que alcanzó la sabiduría para gobernar su ínsula, Aldonza la mujer increíble en su doble faz que la proyecta en una dimensión notable, los terribles rivales de la heroica empresa de los dos viajeros por los caminos del mundo, los gigantes, los magos, los pícaros.
Si dice, y lo comparto, que Cervantes es el mejor novelista del mundo y don Quijote, la máxima expresión de ese universo que no es el nuestro, pero del que formamos parte; pero agrego que Gabriel García Márquez es nuestro Cervantes y Cien años de Soledad, nuestro Quijote.
Académico Instituto de Lingüística y Literatura Uach