Berlín propone cita por Ucrania"Rusia quiere destruir el país"
Mauricio Mondaca/Agencias
El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, inició conversaciones con sus homólogos de Estados Unidos, John Kerry, y de Rusia, Serguei Lavrov, para organizar una nueva reunión internacional en Ginebra ante la escalada de la violencia en el este de Ucrania.
"Debe haber una segunda reunión en Ginebra para cerrar de forma definitiva acuerdos claros que permitan detener el conflicto y buscar una solución política", dijo ayer Steinmeier en una entrevista a la cadena de la televisión germana (ARD). El ministro explicó que en las últimas horas habló del tema con Kerry, Lavrov, la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, y los máximos responsables de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE). Steinmeier apostó por reforzar el papel de este organismo en el conflicto.
En su opinión, la reciente tragedia en Odessa, con casi medio centenar de muertos, debe ser un "punto de inflexión" para que todas las partes implicadas en la crisis retomen el diálogo.
Unos dos mil separatistas prorrusos atacaron ayer una comisaría en la ciudad portuaria de Odessa, en el sur de Ucrania, y liberaron a casi 70 activistas.
Al grito de "¡los rusos no abandonarán a los suyos!", manifestantes forzaron el acceso a la comisaría, en la que varios de sus simpatizantes permanecían detenidos desde los caóticos acontecimientos del viernes, cuando un incendio en una sede sindical de Odessa dejó 46 víctimas fatales. La policía de de esa ciudad informó que liberó a 67 activistas.
El primer ministro de Ucrania, Arseni Yatseniuk, viajó ayer a Odessa, no sin antes responsabilizar a la policía de los sucesos del viernes.
"Si los órganos de seguridad funcionaran, entonces esos terroristas deberían haber sido neutralizados", dijo Yatseniuk, citado por la agencia EFE. El primer ministro encargó a la Fiscalía "encontrar a todos los cabecillas y organizadores" de los disturbios.
El Presidente ruso, Vladimir Putin, reclamó ayer diálogo a la canciller alemana, Angela Merkel, respecto de lso acontecimientos de Ucrania.
Según antecedebntes del Kremlin citados por la agencia DPA, el Jefe de Estado ruso "se mostró firme" en su postura según la cual las autoridades prooccidentales en Kiev deben buscar urgentemente mantener conversaciones con los manifestantes prorrusos en el sudeste del país.
El Gobierno de Ucrania acusó ayer a Rusia de querer destruir el país tras la propagación de los disturbios de los separatistas en el este y la violencia en Odessa. "Lo que ocurrió en Odessa forma parte del plan de la Federación de Rusia para destruir Ucrania y su Estado", acusó el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk. El patriarca ortodoxo de Kiev, Filaret, dijo que "los servicios especiales rusos están detrás de esta explosión de violencia y de actos terroristas".