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Profesionales defienden exclusividad de carreras de salud

Discusión. Académicos de las tres universidades presentes en Valdivia creen necesario que las carreras del sector sanitario sean exclusivamente universitarias.

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Cuadrados con la idea de que sus carreras sean dictadas exclusivamente por universidades están los académicos y también algunos alumnos valdivianos del área de la salud. Todos coinciden en que la posibilidad de optar a postgrados gracias a su licenciatura y los conocimientos que logran a lo largo de los diez semestres de estudio no son compatibles con otro tipo de instituciones.

Esto debido al proyecto de ley que actualmente se encuentra en su tercer tramite legislativo en el Senado y que busca darle carácter de exclusividad universitaria a siete carreras de la salud. Estas son Enfermería, Obstetricia y Puericultura, Kinesiología, Nutrición y Dietética, Tecnología Médica, Terapia Ocupacional y Fonoaudiología, las cuales actualmente pueden ser dictadas en institutos profesionales.

Responsabilidades

Manuel Monrroy, director de la escuela de Kinesiología de la Universidad Austral de Chile (Uach), fue uno de los académicos que defendió la idea de que la que carrera que imparte sea dictada exclusivamente en universidades. Según Monrroy, el kinesiólogo actual tiene una serie de responsabilidades y debe estar facultado para tomar decisiones, es decir, no se limita solamente a una labor técnica.

'El kinesiólogo actual tienen que asumir varias labores. No es sólo un profesional técnico que sigue las órdenes de un médico. Utiliza herramientas con autonomía, usa razonamiento clínico, toma decisiones respecto a la salud basado en evidencia y se hace cargo de programas de forma absolutamente autónoma. Por todo esto, la licenciatura es primordial', señaló.

El académico fue más allá, e indicó que la legislación sanitaria del país impide que un profesional de la salud egresado de un instituto profesional pueda trabajar en el servicio público. 'La ley establece claramente que para trabajar en el sistema público, por ejemplo en un hospital, es necesario tener la licenciatura, que sólo la entrega una universidad', apuntó. Además, dijo desconocer si existe en Valdivia algún kinesiólogo egresado de un centro de formación técnica que se esté desempeñando fuera del ejercicio libre de la profesión.

'La figura del profesional egresado de un instituto profesional no existe, porque el profesional luego ingresa a una universidad para sacar la licenciatura, homologando los ramos', añadió el académico.

'La defensa de la exclusividad universitaria no es antojadiza. Desde ese punto de vista, nosotros como entidad académica debemos asegurar la formación y hacernos responsables de lo que implica formar a un profesional que tomará decisiones. Por ende, no es solamente solicitar la exclusividad y sentirnos satisfechos, es una tarea constante para formar profesionales responsables y que sus conocimientos estén amparados por la universidad', agregó el kinesiólogo.

Finalmente, Monrroy destacó que hay programas relacionados con enfermedades respiratorias que son de exclusiva responsabilidad kinésica y que estadísticamente ha ayudado a disminuir la mortalidad infantil. 'Este es un ejemplo claro del impacto que tienen el profesional kinesiólogo de hoy en día', apuntó.

Formación integral

Similar es la visión de la kinesióloga Mirella Burgos, académica de la Universidad Austral de Chile y representante del Colegio de Kinesiólogos de Chile ante el tema de la exclusividad universitaria.

La profesional recordó que la suya es una carrera relativamente nueva y que nació al alero de las universidades.

'El profesional kinesiólogo requiere tener algunos estándares mínimos para atender a la población en salud y estos estándares tienen que ver con la calidad, con el tipo de pensamiento que se genera en la universidad y también tiene que ver con los requerimientos que se generan el sistema de salud, es decir, cada vez se requiere profesionales con un grado mayor de especialización y en la universidad se da la opción del postgrado', explicó.

'Nosotros en ningún caso no validamos la experticia técnica. Lo que decimos es que nuestra área debe estar al alero de las universidades. El kinesiólogo toma muchas decisiones en su área, tiene un importante grado de autonomía en programas de IRA (Infecciones Respiratorias Agudas) y también en las prestaciones que se ofrecen. El médico sólo ordena que el paciente vaya al kinesiólogo, pero es este profesional quien diseña el tipo de intervención que va a realizar y se hace cargo de la responsabilidad de ella. Ese grado de responsabilidad es relevante en el tema de la formación', aclaró la académica.

Calidad

Fernando Cruzat, director de Kinesiología en la Universidad Santo Tomás de Valdivia, apostó por la calidad del profesional universitario. 'Nuestra visión pretende formar personas comprometidas con la formación y con la calidad. Y a su vez que puedan intervenir en el sistema sanitario aportando a la generación de políticas públicas', explicó.

También recordó que el Código Sanitario exige que un titulo otorgado por una universidad reconocida por el Estado para desempeñarse en cualquier actividad relacionada con la conservación y restablecimiento de la salud.

'Está en juego la calidad de vida y la salud de la población. Por lo tanto, se debe aspirar al máximo de desarrollo en lo espiritual y material y sobre todo tratándose de la vida, es que estas carreras se debieran dar en las universidades, donde hay una mayor cantidad de años de estudio y donde se apunta a la especialización a través de postítulos y doctorados', añadió.

Similar fue la visión de Irene Charpentier, directora de la carrera de Nutrición y Dietética de la UST, quien afirmó que es fundamental que las carreras de la salud sean exclusivamente universitarias.

Terapia ocupacional

Christiane Stehr, directora de la escuela de Terapia Ocupacional en la Universidad Austral de Chile (Uach) señaló que su opinión personal es que el factor calidad no es el tema central de la discusión.

'Puede existir institutos que saquen profesionales técnicos de muy buena calidad. El asunto va por otro lado, va por la licenciatura, porque si se aprueba esta ley como salió de la Cámara de Diputados tendremos estudiantes de primera y segunda categoría. Los egresados de un IP hoy en día no pueden trabajar en ningún organismo de la administración pública. Otro dato duro es que hoy los egresados de los IP ganan la mitad de lo que ganan los universitarios', señaló.

La académica agregó que en la actualidad la falta de médicos ha hecho que algunos terapeutas ocupacionales ocupen jefaturas en el servicio público. 'Esto lo pueden hacer porque en la universidad tienen ramos de administración, aprenden a razonar. La licenciatura te da una forma de pensar especial para tomar decisiones, mientras que en un IP se concentran los conocimientos en seis semestres', apuntó la profesora Stehr.

La académica agregó que el profesional universitario recibe conocimientos holísticos durante su paso por al enseñanza superior. 'Obtiene conocimientos más profesionalizados, no sólo la técnica. Yo creo que una persona que sale de un instituto profesional puede ser un excelente ejecutor de técnicas de Terapia Ocupacional, de Kineseoterápia, pero hoy a los profesionales no se les pide ser sólo ejecutores de técnicas, hoy en día se les exige que sean generadores de conocimiento. Eso significa que alguien que viene de la universidad, si podrá cumplir con todo esto', apuntó.

U. SAn SEBASTIÁN

Quien también hizo referencia a la calidad que debe tener el profesional fue el director de la escuela de Kinesiología de la Universidad San Sebastián en Valdivia, José San Martín. 'El porqué todas estas carreras deben ser exclusivamente universitarias va de la mano con la calidad de la atención que requiere hoy en día el sistema de salud chileno', argumentó el docente.

San Martin coincidió con sus colegas al recordar que el Código Sanitario exige ser profesional universitario para desempeñarse en le sistema público. 'Se debe tener el grado licenciado y únicamente lo dan las universidades. Por esto, muchos estudiantes de institutos hacen un año más de estudios en una universidad para lograr la licenciatura', añadió.

Finalmente, recordó que el universitario tiene la posibilidad de perfeccionarse optando a postgrados. 'Esto permite generar conocimientos y en consecuencia el egresado de un instituto no puede optar a un postgrado, lo que lo va a limitar. Esto hace una diferencia entre profesionales de primera y segunda categoría', aclaró el docente.

El proyecto de ley que modifica el artículo 52 de la Ley Orgánica Constitucional de Educación para añadir estas siete carreras del área de la salud a la lista de las profesiones exclusivamente universitarias, será revisada durante la primera quincena de junio en el pleno del Senado y luego por una comisión mixta, que estará integrada por parlamentarios de ambas cámaras.

El proyecto original fue ingresado el 20 de abril de 2005 a la Cámara Alta por los senadores Evelyn Matthei (UDI) y Alberto Espina (RN), en la cual los parlamentarios propusieron modificar el artículo 52 de la Ley Orgánica Constitucional de Educación para agregar estas siete carreras a la lista de profesiones que sólo las pueden dictar las universidades.

Durante el primer semestre de 2005, el proyecto superó el primer trámite legislativo. Sin embargo, luego de esto la moción (proyecto de ley presentado por parlamentarios) quedó detenida en la Cámara de Diputados a la espera de su segundo trámite legislativo. En 2009, la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados reactivó el proyecto y emitió un informe. Posteriormente, en septiembre de ese año la Cámara de Diputados aprobó en general la iniciativa. Finalmente, en abril de este año el proyecto fue revisado en particular por la Cámara Baja.

En esta última etapa, los parlamentarios decidieron quitar del proyecto a cinco carreras, manteniendo con la calidad de exclusividad universitaria sólo a Enfermería y Obstetricia y Puericultura.

Sin embargo, a mediados de mayo el proyecto inició su tercer trámite constitucional, que implica una revisión de la Comisión de Educación del Senado, la cual rechazó las modificaciones hechas por la Cámara de Diputados y se decidió revisar el proyecto original. En otras palabras, considerado la exclusividad para las siete carreras en cuestión.