Educación parvularia...nuevos desafíos
El proyecto de ley que crea la Subsecretaría e Intendencia de Educación Parvularia y recientemente firmado por el Ejecutivo, viene a corroborar la afirmación que 'la adquisición de habilidades, aprendizajes y conocimientos de nuestros niños y niñas, desde sus primeros años de vida, no puede esperar'. Según se establece, la Subsecretaría se encargará de diseñar y coordinar las políticas en educación inicial; mientras que la Intendencia -que formará parte de la actual Superintendencia de Educación Escolar- tendrá la misión de fiscalizar el correcto funcionamiento de los recintos de educación parvularia.
Por tanto, resulta fundamental difundir el significado de la Educación Parvularia en el desarrollo de los párvulos, ya que cada año que este posterga su ingreso al nivel, es un tiempo en que le restamos oportunidades y por qué no decirlo, limitamos en alguna medida su desarrollo intelectual, físico y emocional, situándolos innegablemente en una clara desventaja en relación a sus pares que sí asisten y se nutren de estos procesos de enseñanza desde temprana edad. En esta etapa, ellos tienen la necesidad de explorar, descubrir, conocer, actuar y relacionarse con todo lo que les rodea, transitando desde la seguridad de la familia hacia un mundo nuevo, que necesitan conocer y entender. Esta transición debe llevarse a efecto en un entorno de bienestar, seguridad, afecto y acogida en el cual las Educadoras, -que son los nuevos adultos significativos que intencionarán pedagógicamente sus experiencias-, contribuirán al andamiaje con el cual los más pequeños enfrentarán estos nuevos desafíos.
Los aportes hechos desde otras disciplinas y que han contribuido a enriquecer y entender el concepto de párvulo y de cómo este aprende, han significado un gran reto, no sólo para las Educadoras en ejercicio, sino también, para las Universidades e Instituciones de Educación superior involucradas en la formación de estos profesionales, los que ya han rediseñado sus mallas curriculares para responder a una práctica pedagógica innovadora en beneficio de un servicio educativo de calidad, el que deberá ir de la mano con un compromiso tácito desde las Educadoras de Párvulos, de seguir en formación y capacitación continua.
Frente a este escenario, se hace necesario y urgente despertar en nuestra juventud mayores vocaciones, ser Educadora de Párvulos hoy, significa hacerse parte de una labor trascendental en el crecimiento del ser humano.