Una de las enseñanzas que dejó el sexto encuentro Sur Mujer es que el cuidado del medioambiente es una tarea que se puede asumir hoy e individualmente. Que vivir en armonía con el entorno no es una filosofía extraña de vida o una moda, sino una elección personal, rápida y sencilla, vinculada a acciones concretas, más que a discursos.
Separar la basura, usar menos plástico, caminar, reciclar en vez de desechar, ahorrar energía, cuidar el agua, no dejar desperdicios en la vía pública, usar leña seca, valorar el paisaje, son conductas que se pueden asumir, tal como la han hecho quienes dieron su testimonio o expusieron sus productos en la actividad, desarrollada durante el fin de semana en el Casino Dreams.
Sembrar la preocupación al respecto es uno de los méritos del evento. Más aún en Valdivia, donde el tema resulta importante para la comunidad y también para las autoridades: ahí están las iniciativas de cambio de luminarias, el hermoseamiento de áreas verdes, la construcción de uno de los vertederos más importantes del país, con un centro especial de reciclaje.
Están también de ejemplo las acciones para evitar que crezca la contaminación atmosférica que, aunque difíciles de asumir, han sido acatados y apoyados por la mayoría de la población. Es decir, hay inquietud y se puede canalizar para la adecuada protección de la naturaleza privilegiada en la cual nos toca vivir.
Paradojalmente, en los mismos días en que Sur Mujer instalaba este tema en la agenda local, se conoció la compleja situación vivida por los vecinos de Brisas de Guacamayo en Valdivia, donde un basural clandestino amenaza su calidad de vida, sin que contar con ayuda suficiente para enfrentarlo. Con ese hecho se pudo ver la otra cara de la moneda: hábitos ciudadanos errados que dañan el espacio compartido e instituciones que no intervienen, aunque se les pida.
Queda en evidencia, entonces, la necesidad de conciliar voluntades, extendiendo aún más la conciencia sobre la responsabilidad colectiva frente al medioambiente y la fuerza para que las decisiones se mantengan en el tiempo. Obviamente, queda mucho por hacer.