Cáncer cérvico-uterino por virus papiloma
El cáncer cervicouterino (CaCu) es una alteración de las células del cuello uterino y no presenta síntomas hasta que esta patología ha avanzado a etapas muy severas. En Chile es la segunda causa de muerte en mujeres en edad reproductiva, registrándose más de 600 muertes por año (50 al mes). Actualmente, esta enfermedad es curable si se detecta precozmente a través del examen de Papanicolaou (PAP). Este examen es para todas las mujeres de 25 a 64 años, quienes deben practicarlo cada tres años, siempre y cuando su resultado se encuentre entre los rangos de normalidad. Entre los factores de riesgo que predisponen la aparición del CaCu, se encuentran las relacionadas con las infecciones de transmisión sexual; el inicio precoz de la actividad sexual y múltiples parejas sexuales .
En las mujeres, los VPH de alto riesgo causan más del 70% de los cánceres del cuello del útero, además de los cánceres de vulva, vagina y ano. En los hombres, puede producir cáncer del ano y del pene.
Una de las maneras de prevenir el Cáncer cervico-uterino es a través de la vacunación contra el Virus Papiloma Humano (VPH), en las niñas. Es necesario protegerla del cáncer del cuello del útero y otras enfermedades causadas por el VPH. Todas las mujeres pueden estar expuestas a este tipo de infección.
A través de estudios se ha comprobado que la vacuna, evita las lesiones iniciales del cuello del útero; constituye un elemento de prevención inicial en el ciclo de vida de las mujeres por ello, se estima que disminuya la mortalidad por Cáncer cervico-uterino. En relación a la edad de inicio del esquema de inmunización, investigaciones confiables, han demostrado que a la edad de 9 a 10 años, el sistema inmune tiene una mejor respuesta a la vacuna, que en edades mayores. De hecho, la OMS la recomienda en este grupo etario y la acción protectora de esta vacuna es de larga duración. Mientras que en el caso de mujeres mayores de 20 años, se sugiere que se sometan a los exámenes de diagnóstico precoz del Cáncer Cérvico-uterino a través de la citología cervical (Papanicolaou).
Por lo tanto, resulta fundamental una detección temprana durante todo el ciclo de vida de todas las mujeres, utilizando para ello todos los mecanismos de acción como la vacuna contra el Virus Papiloma Humano.