El taller de tejido de mandalas del Liceo Técnico Valdivia finalizó sus actividades luego de cuatro meses de duración, que incluyeron noventa horas semanales y 11 clases prácticas en total.

La actividad esta inserta en el programa de Jornada Escolar Completa (JEC) y apunta a mejorar los procesos de atención y concentración de alumnas de 1° y 2° medio, que presentaban estas dificultades en el aula.

La metodología utilizada en la realización del taller, constó de clases teóricas que fundamentaron la realización del taller, sumado a clases prácticas donde se les enseñó a las alumnas las técnicas de tejido y las diversas combinaciones que dan lugar a figuras geométricas únicas.

La iniciativa apoyada por Camila Torres, psicóloga, y Natalia Yáñez, psicopedagoga del Liceo Técnico, se realizó gracias al aporte de donaciones de profesores y respaldo del establecimiento educacional durante todo el tiempo de su realización.

En su balance, las profesionales facilitadoras destacaron los beneficios que trae el tejido de mandalas para la salud, recalcando que "los resultados alcanzados tras la realización del taller fueron evidantes en las alumnas que participaron de la iniciativa y nos sentimos muy conformes", resumió Camila Torres.

Más de 8 mil tapas de botellas plásticas de distintos colores y tamaños se utilizaron durante una semana para la elaboración de un mural decorativo al interior del Colegio Teniente Merino de Valdivia.

La actividad se desarrolló con ocho alumnas de 5° a 7° básico, quienes son parte del taller de medioambiente del colegio, liderado por el profesor de historia Gerardo Gajardo, quien también es miembro de la ONG ambientalista internacional Sea Shepherd.

Toda la comunidad educativa participó en la recolección de las tapas plásticas para la elaboración del mural durante dos meses, mediante un concurso que premió con una planta cultivada por los mismos alumnos del taller de medioambiente, al curso que reunió mayor cantidad de tapas plásticas.

Gerardo Gajardo, profesor a cargo de la actividad, señaló que "para las niñas participantes en la construcción del mural fue una experiencia positiva, donde pudieron poner en práctica el hecho de reutilizar y crear el mural, además de sentirse partícipes de un gran proyecto que quedará para el colegio y a su vez ayudará al medioambiente", destacando el componente de consciencia ecológica que adquirieron las alumnas en todo el proceso de aprendizaje del taller.

Una de las niñas participantes del taller y la elaboración del mural, Ayalén Guzmán, de 5° básico, dijo estar muy contenta con el trabajo realizado por su compañeras e incluso otros compañeros que colaboraron en la actividad, agregando que "aprendimos mucho en todo momento, ya que todos estamos creando conciencia de lo que es el plástico y la basura y lo que provoca en las aves y peces, para enseñarle a otros".

Iniciativa

La idea de darle un nuevo uso a las tapas inutilizadas surgió desde la inquietud de los propios alumnos del taller de medioambiente, quienes al conocer los peligros que provocan los plásticos en el ecosistema marino, decidieron aportar, reuniendo tapas que probablemente podían contaminar el oceano y, de esta manera, acabar con la vida de muchas especies.

Próximo año

Las nuevas actividades planeadas para el próximo año en el taller de medioambiente, contemplan la elaboración de eco-ladrillos que serán utilizados en la elaboración de un invernadero sustentable en el mismo colegio, lo que ayudará al reciclaje y a su vez al cultivo de productos orgánicos. Además, se continuarán replicando iniciativas de recolección de plásticos y educación medioambiental.

Las tapas de botellas son los plásticos más comunes en las playas de la región y afectan a cientos de animales marinos como tortugas, aves, peces y mamíferos en general que las ingieren confundiéndolas con alimento y finalmente les producen su muerte instantánea. Según estudios de la organización Sea Shepherd, al año se estima que un millón de aves y más de 100 mil mamíferos marinos y peces mueren producto de la ingesta de plástico y basura generada por las personas.

Con el objetivo de dialogar acerca del funcionamiento, estructura y trabajo del ministerio de Justicia y su vinculación con la comunidad, se desarrolló en el Liceo Santa María la Blanca un encuentro participativo del seremi de Justicia, Alejando Reyes, con alumnos del plantel.

En la actividad, participaron estudiantes de tercer año medio, quienes aprendieron sobre educación cívica y derechos básicos, orientados por el mismo seremi de justicia, en conjunto a su equipo colaborador en esta instancia.

La actividad se ha replicado en distintos puntos del país y se han impulsado concursos de ensayos y educación a distancia, entre otros, que fomentan el conocimiento de los alumnos a la justicia y su trabajo en el ministerio.

Al respecto, el seremi Reyes, señaló que "esperamos generar un vinculo permanente con los jóvenes estudiantes, para que conozcan nuestro trabajo y a su vez se pueda replicar en otros colegios de la región", haciéndo énfasis en la necesidad de generar instancias de fortalecimiento en la educación cívica y conocimiento de instituciones públicas en la región y a nivel nacional.