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Santos rechaza condiciones del cese al fuego de las FARC

colombia. La organización supeditó la tregua a que las tropas no ataquen a los guerrilleros, lo que fue rechazado por el Presidente, que igual "valoró" el anuncio.

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El Gobierno colombiano del Presidente Juan Manuel Santos valoró ayer el anuncio de las FARC de iniciar una tregua unilateral indefinida a partir de mañana, pero no aceptó la instancia de verificación propuesta por ese grupo guerrillero.

El Mandatario señaló que valora "el gesto del cese al fuego unilateral e indefinido", anunciado el miércoles en La Habana y que entrará en vigor mañana, pero subrayó que no puede aceptar las condiciones impuestas por las FARC, como la de la verificación internacional.

"La verificación que están pidiendo la podemos comenzar a discutir cuando lleguemos al punto que ya esta prácticamente en la mesa", dijo, haciendo referencia al fin del conflicto.

Santos afirmó ayer que el Gobierno no renunciará a su deber constitucional de garantizar la seguridad de sus ciudadanos, descartando así suspender las actividades militares.

"Por ningún motivo vamos a renunciar ni a hacer excepciones en el cumplimiento de esa obligación", manifestó.

Según el Presidente, el Gobierno va a "analizar muy bien el avance y cumplimiento de este cese al fuego", que consideró "un buen paso inicial que debe completarse y complementarse con otros gestos de paz". El Mandatario reclamó a la guerrilla "gestos de confianza" para continuar avanzando "en la dirección correcta". El Jefe de Estado añadió que él está "avanzando bien" en las negociaciones de paz, lo que permite observar que se está "acercando al objetivo del cese al fuego bilateral y definitivo, que es cuando firmemos el acuerdo".

El anuncio del cese al fuego fue hecho el miércoles por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), al finalizar el ciclo 31 de negociaciones en el proceso de paz que se cumple desde hace dos años en Cuba.

En un comunicado emitido horas antes, el Gobierno precisó que "no puede ni quiere" repetir experiencias pasadas cuando se anunciaron ceses el fuego que fueron incumplidos o que se cumplieron parcialmente.

El miércoles el jefe del equipo negociador de las FARC, "Iván Márquez", cuyo verdadero nombre es Luciano Marín Arango, leyó un comunicado en el que aseguró que "hemos resuelto declarar un cese unilateral al fuego y a las hostilidades por tiempo indefinido, que debe transformase en armisticio".

El alto el fuego, según Márquez, se rompería si las tropas estatales atacan a sus guerrilleros, razón por la que el Gobierno colombiano rechazó cesar su actividad militar.

Paralelamente el Frente Amplio por la Paz, una organización de políticos y defensores de los derechos humanos, pidió "generosidad al Gobierno de Santos y gestos del mismo nivel de reciprocidad que el de las FARC", según explicó el diputado Alirio Uribe.

La oficina de las Naciones Unidas en Colombia calificó como un "gesto esperanzador" la decisión de las FARC de declarar un cese el fuego unilateral y de hostilidades por tiempo indefinido. La ONU aseguró en un comunicado que la implementación efectiva de esta medida, anunciada en La Habana, sede de los diálogos, "generaría confianza en que el proceso de paz avanza hacia la finalización del conflicto". La sede recordó que desde que empezaron las conversaciones de paz en Cuba, en 2012, "alrededor de 400.000 colombianos han tenido que desplazarse".