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Sobrepeso, obesidad y ejercicio en el adulto mayor

actividad. Un factor elemental que puede prevenir y mejorar la calidad es el ejercicio, supervisado por un profesional de la educación física.
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El sobrepeso y la obesidad a una avanzada edad pueden generar o intensificar problemas de salud, como la hipertensión arterial y diabetes millitus. Es por ello que un factor fundamental para prevenir y mejorar la calidad de vida es hacer ejercicio físico.

En Los Ríos y en el mundo, la principal causa de muerte son las enfermedades cardiovasculares, que en la región representan un 26,79%. Otro antecedente es que según la Organización Mundial de la Salud, el 80% de los infartos al miocardio y de los accidentes cardiovasculares (ACV) prematuros son prevenibles.

Como indica el docente de Pedagogía en Educación Física de la Universidad San Sebastián, Felipe Poblete, algunos de los factores de los problemas cardiovasculares son la inactividad física, el sobrepeso, la obesidad, ser fumador, no llevar una dieta sana y la falta de visita a diferentes especialistas del área de la salud.

"Nuestro país, al igual que los países desarrollados, está viviendo una etapa avanzada de transición al envejecimiento de su población. Actualmente, una de cada diez personas pertenece al grupo etario adulto mayor y se espera que para el año 2025, esta proporción sea de una por cada cinco personas", subraya.

Agrega que "el aumento de la esperanza de vida en las sociedades avanzadas como consecuencia de la estabilidad económica y el bienestar, ha ocasionado un cambio radical en las pirámides demográficas, produciéndose una transformación y alcanzando lo que se conoce como efecto cono".

"Los cambios sufridos por adultos mayores a nivel de peso corporal, en relación al aumento de grasa corporal y baja inactividad son preocupantes, considerando la repercusión del sobrepeso y obesidad en la funcionalidad y movilidad de miembros inferiores y superiores", asevera.

Añade que "el sobrepeso y obesidad es entendido como el aumento del tejido adiposo, debido a una alta ingesta calórica y bajo gasto energético, lo que se puede tornar perjudicial para la salud del adulto mayor".

"Las mediciones actuales sobre determinación de sobrepeso u obesidad en adulto mayor se centran en mediciones indirectas como la antropometría, Índice de Masa Corporal y circunferencia de cintura-cadera, con la finalidad de determinar el riesgo asociado que pudiese existir en el adulto mayor. Cabe señalar que se torna compleja la utilización y veracidad de estos datos, debido a que los estándares y tablas utilizadas son de población adulta que se extrapolan a población de adultos mayores, no siendo necesariamente las mismas clasificaciones para dichas evaluaciones", explica.

Beneficios

Tal como advierte el docente Felipe Poblete, la baja de peso en un adulto mayor trae consigo una serie de complicaciones y beneficios. "Dentro de las posibles complicaciones, la disminución de peso puede conllevar a la pérdida de masa muscular y como consecuencia generar sarcopenia (pérdida progresiva de la masa y fuerza muscular). A la vez, luego de la pérdida de masa ósea podría ocurrir que disminuya la funcionalidad, lo cual afecta la calidad de vida en los adultos mayores", remarca.

"Por otro lado, los beneficios asociados a la pérdida de peso corporal se verán reflejados en mayor movilidad, desarrollo de actividades de la vida diaria, funcionalidad, mejorar el control de enfermedades crónicas no transmisibles, mejora en el aparato cardiovascular, entre otros", acota.

"Es por ello que, uno de los profesionales, entendiendo que realiza un trabajo dentro de un equipo transdisciplinar, es el profesor de educación física, el cual deberá comenzar el proceso de baja de peso, basándose en ejercicio físico de forma cautelosa, para disminuir al máximo las lesiones o consecuencias perjudiciales que se pudieran generar en el adulto mayor, lo cual debe ser apoyado con dieta", remarca.

También explica que la razón de que en el plan de intervención se consideren ejercicios progresivos, "es para evitar el alto impacto y exigencia cardiovascular".

"Además los ejercicios aumentan la funcionalidad, resistencia y el desarrollo de masa muscular, lo que conlleva a una mayor tasa metabólica basal en reposo, permitiendo una mayor utilización de grasas en estado de reposo", complementa.