El teatro como un arte que desmitifica la vejez
propósito. Realizar actividades artísticas o deportivas permite al adulto mayor compartir y entretenerse, sin importar la edad o características socioeconómicas.
Una de las actividades recreativas preferidas de los adultos mayores es el teatro, disciplina que además permite elevar el espíritu, entrega una serie de beneficios cognitivos y físicos y promociona la integración.
El envejecimiento tiene que ver con un proceso activo y a la vez creativo, que permite desarrollarse y que comienza en el momento en que nacemos.
Este principio también se aborda en el teatro y permite compartir y recrearnos, sin importar la edad que se tenga. Como señala Jorge Rojas, docente a cargo del Taller de Teatro de la Escuela de Verano del Adulto Mayor de la U. San Sebastián Sede Valdivia, ésta es una de las claves de porqué las personas mayores se reinventan desde las tablas, donde transmiten su alegría por vivir.
"Las personas mayores que hacen teatro lo practican porque lo han hecho durante toda su vida o porque lo consideran un desafío personal, de poder pararse frente a un grupo de personas y hablar en voz alta. Ser otro, jugar, sacarse el miedo al ridículo alguna vez. Es un desafío por una etapa inconclusa, sabiendo por lo demás que uno nunca termina por cerrar todos los ciclos", comenta el docente.
teatro
Asimismo, Jorge Rojas indica que el teatro "es un catalizador que sirve para reír, denunciar y reflexionar. Igualmente, en el escenario confluyen aprendizajes, representaciones, actitudes y nuevas relaciones, que invitan a redescubrirse. Es un generador de cambios, rompe mitos, permite beneficios físicos, mentales, intelectuales, espirituales, emocionales y de vínculos familiares y sociales, incrementa la autoestima, confianza, concentración, tolerancia y la escucha activa, entre otros beneficios".
Respecto a la experiencia de dirigir a mayores, Jorge Rojas expresa que "ha sido muy entretenido enseñar técnicas teatrales y ver cómo nadie se engaña a sí mismo, tratando de aprovechar al máximo los ensayos, sin tiempo para achaplinarse. Destaco también la necesidad de sentirse bien con el otro, de forma prudente y respetuosa. Es decir, se puede hablar de integración, al sentirse además de vivos y libres, que son considerados por sus intervenciones".
"El trabajo actoral te obliga a tener cierta claridad mental para separar al individuo del personaje, de poder distinguir qué digo, cómo lo digo y qué intención tengo. Julio Jung, Delfina Guzmán, Nissim Sharim son un gran ejemplo de buenos actores que han estado gran tiempo vigentes y que son un baluarte a seguir. Ahora se está rodando una película llamada Héroe, con varios actores seniors e independiente de si sea buena o mala, son protagonistas, lo que es sumamente potente", acota.
Agrega que "cuando realizas arte, te encuentras con algo que tiene cierto grado de belleza que te eleva el espíritu, lo que en el teatro se retribuye con el aplauso y es precisamente ese aplauso que tanto hace enamorarse con el teatro a quienes son actores o a quienes lo practican, segmento del cual los adultos mayores no están ajenos".
"La invitación es a que se atrevan y que no se limiten y que disfruten la jubilación, que es el júbilo de estar en la tercera edad. El teatro hace soñar, da esperanza y promueve un desarrollo integral, desmitificando la vejez", sostiene.
Recomendaciones
Dentro de las sugerencias que realiza el especialista, se encuentra realizar trabajo de improvisación y utilización de palabras claves; respetar turnos de habla y respirar antes de hablar; informarse de los recursos teatrales como tipo circense o mimo; hacer ejercicios articulatorios de vocales y consonantes diariamente; dividirse en grupos de trabajo; reforzar en el argumento la capacidad crítica; una buena opción es el género de la comedia, farsa y sátira e hidratar las cuerdas vocales.