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Destacan unión de agricultores del sur frente a problemas del sector

Juan E. Hoffmann. El presidente de Saval F. G. explicó que
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cmunozd@australvaldivia.cl

No repetir los errores del pasado. No llegar a tener los mismos problemas con las tomas de terreno que la región de La Araucanía. No vivir con una sensación de inseguridad. El presidente de Saval Federación Gremial y director titular de la Sociedad Nacional de Agricultura, Juan Enrique Hoffmann, aseguró que los representantes de los gremios relacionados con el agro del sur del país hoy se repiten estas frases cada día y en cada reunión.

¿Qué errores? "En La Araucanía y durante una década distintos grupos de la región no tuvieron la unión para enfrentar desafíos que tienes que encarar necesariamente con ayuda, como es el de la violencia. Hay que rememorar el caso de la familia Luchsinger", explicó. ¿Qué problemas? "La violencia le pasa a decenas de familias -también mapuches-que sufren la violencia. Hay sectores donde ya no hay tránsito de camiones, empresas de fertilizantes ya no quieren llevarles productos, no quieren venderles. Se empieza a generar un círculo de pobreza, porque cuando hay una sensación de miedo dejas de invertir y contratar", detalló.

Y plantearse esos problemas, según Hoffmann, ha logrado una unión de gremios espontánea e inédita. "Cuando no actuábamos juntos los problemas se invisibilizaban. Era más fácil no escucharnos. El mérito de los gremios es entender que los agricultores nos están pidiendo a gritos que estemos unidos. La gente quiere sentirse segura y trabajar en paz. Y ocupamos esa unión para distintas cosas. También para solicitar la emergencia agrícola", dijo.

"La unión que estamos propiciando en Los Ríos y en Los Lagos, junto a La Araucanía y en el Biobío no se había dado nunca antes", agregó.

Fundo Antilhue

Esa unión se vio reflejada durante la tercera semana de marzo. Cuando unas doce personas del Lof Mapu ingresaron al Fundo Antilhue, en Lanco -perteneciente a la familia Del Prado- reclamando tener derechos sobre esas tierras.

Alrededor de 60 agricultores de Valdivia, Panguipulli, Osorno y Llanquihue llegaron hasta el predio, exigiendo que Carabineros actuara, lo que no era posible por la presencia de niños. El ambiente se tensionó tanto, que para evitar una situación violenta entre agricultores y comuneros Saval Federación Gremial solicitó la mediación del intendente de Los Ríos, Egon Montecinos. Los miembros Lof Mapu desalojaron el lugar con la promesa de una reunión durante los próximos días.

¿Cómo fue la organización? Juan Enrique Hoffmann detalló cómo fue la reacción de ese día. "Pedro del Prado nos llamó por teléfono el domingo a las 10.30 de la noche y nos informó. Nos preguntó ¿Qué hago?. Todo es difícil en el mundo rural, perdíamos comunicación. Pudimos hablar durante la mañana del día siguiente. Él hizo una denuncia en Carabineros y pidió resguardo policial. Le recomendé que además de la denuncia autorice a Carabineros a un desalojo inmediato. Solo de esa manera Carabineros puede desempeñar su trabajo de manera rápida y efectiva", relató.

Luego de coordinarse Saval F. G. con la también asociación gremial Aproval, Juan Enrique Hoffmann viajó a Santiago para conversar con representantes de la Sociedad Nacional de Agricultura. "Luego de ver que los usurpadores estaban con niños y que Carabineros tenía que ceñirse a un protocolo especial, vislumbramos que la tensión se podía cortar. Ahí había 60 agricultores que estaban movilizados y con una voluntad de apoyar al agricultor que a veces es difícil manejar, y esto se debe a la falta de acción instruida previamente por la justicia, que tiene con las manos atadas a Carabineros", destacó.

Hoffmann solicitó al intendente Montecinos su mediación. "Él fue muy sensato al actuar y agradecemos su gestión, como también la del general Pedro Larrondo", dijo.

Sobre violencia

El presidente de la Saval aseguró que toda toma de terrenos es -a su modo de ver- un acto violento. "Ya sea en lo físico, sicológico y emocional. El mejor ejemplo para graficarlo es que entre una persona a tu casa sin que sepas quién es. ¿Qué sentimos? Una sensación de terror. Es lo mismo que siente un agricultor en su campo. Imagínate si entran 15", aseguró.

Hoffmann indicó además que la reacción de los agricultores podía ser difícil de manejar por sentirse desprotegidos. "Los jueces aplican la ley, pero ésta a veces no da el ancho. Hay que ser garantes con los derechos de las víctimas. Por eso hacemos un llamado al poder legislativo para que las leyes sean duras con el victimario y la víctima no se sienta sola. De lo contrario empezamos a ver lo que ocurre en Santiago, cuando ven una persona robar la amarran a un poste y la humillan. Eso no está bien, pero es una respuesta ciudadana a la falta de empatía de los jueces de meter a los malos a la cárcel o a través de trabajo voluntario. Nosotros como gremio estamos unidos por la no violencia", explicó.