Enterrado en el patio de una casa en calle Mac Iver con Cochrane, de Paillaco, fue encontrado el cuerpo de Víctor Rubén Díaz Gatica, de 55 años, asesinado el domingo por José Marcelo Garrido Garrido, de 33 años.
El hallazgo lo hicieron carabineros de esa comuna, luego que el agresor concurriera a las 8:50 horas de ayer al Juzgado de Garantía, para entregarse y confesar lo ocurrido.
En su relato, Garrido dijo que ambos estaban bebiendo en su casa el domingo por la noche, que discutieron y que el hombre lo agredió. Para defenderse, golpeó a Díaz en la cabeza con una gran piedra que había en el patio. Le destrozó el cráneo.
Su primera reacción fue desnudar el cuerpo y enterrarlo en una pequeña fosa, que luego tapó con hojas y tierra.
Así lo encontraron los efectivos policiales.
Un vehículo del Servicio Médico Legal, llegó pasadas las 14 horas al lugar, para recoger el cadáver y trasladarlo a Valdivia.
ESQUIZOFRENIA
Según los primeros datos recogidos por Carabineros, Garrido tiene antecedentes siquiátricos por esquizofrenia.
Leal, ordenó informes sobre la autopsia al cadáver y de pericias que hizo el Labocar de Carabineros, que incautó la piedra con que el homicida golpeó mortalmente a su víctima.
IMPACTO EN FAMILIAS
El homicidio impactó a la comunidad paillaquina.
Los familiares de Garrido señalaron que el hombre necesitaba tratamiento médico e internación, pero que nunca habían logrado conseguirlo.
Según una de sus sobrinas Roxana Palma, su tío estuvo hospitalizado una vez en siquiatría del Hospital Base. "Me parece que fue en 2010, y mi tía Rosa, la mamá de él, predijo que algo malo iba a pasar, porque se ponía violento. Siempre decía que en Salud no le hacían caso, que iban a esperar que hiciera algo grave, para encerrarlo".
La joven dijo además, que la madre de Garrido murió en 2013 y que antes de fallecer pedía que mantuvieran hospitalizado a su hijo.
José Garrido vivía en la calle Mac Iver 464, en una pieza interior de la propiedad de su familia, porque ésta, "no lo quería ver durmiendo en la calle", dijo su sobrina.
Los habitantes de la vivienda manifestaron que no se percataron de lo sucedido, hasta que ayer vieron llegar a los carabineros.
Ahora, su familia, espera que sea considerado, "más que para enviarlo a la cárcel, para un tratamiento de verdad, para que no vuelva hacer, lo que hizo".
LA VíCTIMA
A la familia del occiso no se le permitió ayer ver el cadáver. Solo reconocieron las ropas y señalaron que estaba desaparecido desde el domingo.
Nivia Gatica, una de sus cuñadas, dijo que Víctor Rubén Díaz , era el tercero de 9 hermanos, y que siempre salía a beber, pero que era un hombre bueno.
"Un borrachito bueno que hacía diferentes pololitos, como cortar leña y limpiar, movilizándose desde el sector conocido como el Pozo Lastre, en la periferia de Paillaco, donde vivía solo en una casita".
"Su madre lo predijo en 2013, antes de morir, que José iba a matar a alguien y que entonces, se preocuparían de su enfermedad".
"Víctor vivía solo y reunía dinero haciendo pololitos como picar leña. Por la radio supimos lo que había pasado".
No eran amigos
Tanto el imputado, como la víctima. eran personajes de Paillaco, sin oficios conocidos. Se habían concertado para beber juntos el sábado, aunque no eran amigos.
La versión preliminar de Garrido, fue que Díaz, lo había atacado primero con la piedra, cuando comenzaron a pelear.
José Garrido permanece desde ayer en el Complejo Penitenciario de Llancahue, hasta ser formalizado mañana en el juzgado.
El cadáver estaba desnudo , cubierto de tierra y hojas, de forma superficial, por lo que Carabineros pudo hallarlo de inmediato.
