La esposa del cabo primero Carlos Eugenio Mella Candia (27), quien el 1 el enero de este año se transformó en el mártir de Carabineros N° 1.054, al morir ahogado por tratar de rescatar a niños en peligro en Mehuín, llamó a la comunidad en la región de Los Ríos, a manifestar "con más fuerza, su apoyo a la campaña No Más Carabineros Asesinados".
Charlyn Santiesteban Cifuentes (23), de Lanco, recibió en Santiago, de manos de la Presidenta Michelle Bachelet y del general director de Carabineros, Gustavo González, el certificado que acredita el ascenso póstumo de su esposo a suboficial mayor, y la Medalla Al Valor, por su acto heroico en la playa de Mehuín.
"Fue algo lindo, emocionante, en especial porque recibí esos reconocimientos de manos de la Presidenta y del general director. Es algo que no olvidaré", dijo.
LO HABIA HECHO ANTES
Ahora, a cuatro meses de lo sucedido, ella afirma que "lo extraño mucho" y que "Carlos lo quiso así, porque buscaba siempre hacer lo mejor para su institución, para sí y por los demás. Tenía vocación y no rehuía el peligro, porque a comienzos de 2014, también en Mehuín, salvó a una persona de morir ahogada".
Agregó que "a quienes no les interesa o preocupa que haya gente que asesine a un carabinero, es porque no los conoce. Yo viví un año y medio de matrimonio con Carlos y aprendí la dedicación que sentía por su institución y por la comunidad. Y quienes no quieren o no reconocen la labor de los carabineros y hasta pareciera que se alegran cuando les sucede algo grave o mueren en acto de servicio, desconocen que detrás de cada uno de ellos también hay padres, esposas, hijos y amigos que los quieren y sufren con lo que les sucede".
PRESION Y UNIFORME
Afirma que "hay quienes no saben de la presión que ellos llevan puesta, junto con su uniforme, porque la gente siempre les está exigiendo más y más. Ellos deben estar en todos lados, porque la gente confía en ellos y eso es una presión que los obliga a actuar, a veces sin medir el peligro, hasta morir si es necesario".
con sus dos hijos
Charlyn Santiesteban quedó sola, son sus hijos Alvaro, de tres años, y Camil, de solo un año, quienes son el resultado del matrimonio con su esposo mártir, quien también era oriundo de Lanco, aunque se formó como carabinero en Santiago y trabajó en Malalhue.
"Conservaré sus fotos y las de la ceremonia en Santiago, para que mañana sus hijos se sientan orgullosos de él. Tengo también un hermano que ahora se está formando como carabinerosen la Escuela de Formación de Valdivia. Tiene vocación y será un buen carabinero", señaló.
Legado heroico
"Su acto es un legado que representa el compromiso y disciplina de los carabineros", dijo el general Pedro Larrondo, jefe de zona.
El cabo Carlos Mella, oriundo de Lanco, se transformó en el mártir N° 1.054 de Carabineros de Chile.
Dos de los cuatro menores de edad que se ahogaban en Mehuín, alcanzaron a ser rescatados por el cabo Mella.